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martes, diciembre 10, 2019

El comienzo del día



Me gusta desayunar panetone con leche templada. Panetone de frutas, no de chocolate. La masa no debe estar demasiado dulce. No me gustan las cosas dulzonas. Cuando desayuno satisfactoriamente, emprendo la jornada mirando al mundo de otra manera: con buen humor. Empezar bien el día es muy importante.

A veces me canso del panetone y regreso a mis cereales con leche. La verdad es que los cereales están muy bien. No me gustan dulzones. Cereales de avena o los típicos granos de trigo aplastados (vamos, los del gallo en la caja) es una buena opción para empezar el día.

¿Qué desayunaría santo Tomás de Aquino? He intentado encontrar artículos que hablaran de su supuesto sobrepeso. No he encontrado nada concluyente. Yo he perdido cinco kilos (cinco y medio) en las últimas cinco semanas. El mejor modo de perder peso es leer a san Anselmo de Canterbury. Entre sus obras, lo mejor es su Argumento Ornitológico.

Mientras que leer a Flaublert o a De Lubac, claramente, engorda.