El otro día, viendo un
documental sobre reliquias, tuve una idea. Siempre me vienen ideas a la cabeza.
Las cuales son clasificadas en cuatro conjuntos: buenas, regulares, malas,
dudosas.
Entre estos cuatro
conjuntos hay varios subjuntos e intersecciones. [Desde
que soy cura siempre que voy a decir intersecciones digo intercesiones.
Me pasa lo mismo con la palabra colutorio. No hace falta que diga la
palabra equivocada]
Se me ocurrió la devoción
que daría a la gente crear unas réplicas lo más perfectas posibles de los
instrumentos de la Pasión. Y bendecir y ungir mucho esas réplicas para que
excitaran el recuerdo de los sufrimientos de Nuestro Señor. Cuando hablo de bendecir
y ungir mucho, mañana explicaré con detalle a qué me refiero.
Unas réplicas que sean
muy perfectas, ya de por sí, excitarán la devoción. Pero si, además, son
colocadas en un marco que sea lo más adecuado para ello, pues mucho mejor.
Es decir, no estoy
diciendo que se coloquen en una capilla, sino que la misma capilla, entera,
está pensada para ayudar a que surja esa devoción.
Es más, el entero templo
podría ser construido con la idea de servir de itinerario para la devoción de
esos Instrumenta Passionis o Arma Christi, como los han llamado
otros.
Esos objetos bendecidos
serían distribuidos, por ejemplo —caben muchas más posibilidades—, en cinco
capillas. Capillas que no serán decoradas como si fuera una exposición, sino
que serán decoradas como una capilla que contiene una reliquia. Es decir, no se
acondicionarán con figuras tridimensionales y pinturas panorámicas como las reconstrucciones
de un museo, sino que se creará un espacio sacro pensado para la veneración. Esas
capillas podrían ser las siguientes:
La Capilla
de la Última Cena
—el Santo Cáliz
La Capilla
de los Ropajes
—la túnica inconsútil
—los cuatro trozos en que
fue dividido su manot
—la clámide púrpura, con
la que vistieron a modo de burla
—el Velo de la Verónica, con
el que fue enjugado el rostro del Nazareno
La Capilla del
Pretorio
—la columna donde Jesús
fue mandado azotar.
—el flagelo
—una vara de abedul la
que le adjudicaron como cetro a modo de burla.
La Capilla
del Calvario
—el título I.N.R.I.
—la corona de espinas
—una réplica de la Cruz
de tamaño natural
—los tres clavos utilizados
en la crucifixión.
—la punta de la lanza con
la que se abrió su costado
La Capilla
de la Resurrección
—solo contendrá una
réplica de la Sábana Santa de Turín