jueves, junio 16, 2022

La emoción de releer un texto muy conocido bajo una nueva luz

 

Acabo de colgar una charla sobre las cuatro bestias que vio el profeta Ezequiel.

https://www.youtube.com/watch?v=X5s4jrn7DYA

Lo curioso es que hoy se me ha ocurrido una cosa que me ha parecido una simetría deslumbrante en la Biblia: la comparación entre las cuatro bestias de Daniel y los cuatro vivientes de Ezequiel.

Las unas son bestias consecutivas para el mal, bestias materiales. Los cuatro vivientes son ángeles para el bien, poderosos seres espirituales.

Las unas son consecutivas, mientras que alrededor del Trono del Señor son simultáneas.

Fijaos en el paralelismo entre el Antiguo y el Nuevo Testamento:

Al referirse a los cuatro reinos crueles y a las dos bestias del Apocalipsis:

Daniel 7, 25: חֵיוָא (jeba) es bestia, de la raíz animal.

Apocalipsis 13, 2, θηρίον (zeríon) es bestia, animal salvaje.

Mientras que al referirse a los cuatro seres angélicos:

Ezequiel 1, 5 חַי (jai) que significa vivo, viviente.  

Apocalipsis 4, 6 ζῷον (zoon) que significa viviente.

Lo interesante es que al expresar el poder se expresa con los iguales símbolos zoomórficos del león y el águila. Pero a ese poder se le une la humildad del buey y la humanidad (es decir, bondad) del hombre.

Releer a Ezequiel tras meditar a Jeremías va a resultar fascinante para mí. Esta será la siguiente charla. Además, es tan bonito hablar de lo que hay en las inmediaciones del Trono del Señor.

Si a alguien se le ocurre algo más para esta charla que daré, por favor que lo aporte para todos en los comentarios y lo mencionaré cuando la grabe.

Os lo aseguro, no exagero, este paralelismo me ha parecido embelesador. De pronto un texto tantas veces meditado aparece bajo una nueva luz.

Como siempre las ruedas junto a los serafines aparecen como seres cuyo simbolismo es difícil de entender. Fijaos que las cuatro ruedas angélicas aparecen en el fresco que he colocado arriba; en el centro, a la derecha, hacia arriba.

El Prado

 

Que retrato tan artístico. Los tonos, la composición, la serenidad de la mirada, la frescura de la infancia.

Hoy he compartido almuerzo con tres agradabilísimas personas. El adjetivo agradable no es un calificativo universal. Después nos hemos ido a ver El Prado. Qué bonito es pasear rodeados de tanta belleza. No solo cuadros, también sus mármoles lechosos, también la vajilla del Delfín de Francia, también retablos románicos. Si la entrada fuera gratuita, iría allí a darme una vuelta cada semana. Sí, aunque fuera para transitar por sus pasillos, solo fijándome de tanto en tanto en alguna obra concreta.

En la calle me he encontrado con un sacerdote venezolano que me ha reconocido y he andado un rato con él. También le he grabado dos vídeos para saludar a gente de su tierra. Le he ido a enseñar el Panteón de Hombres Ilustres, pero estaba cerrado. La entrada es gratuita.

Ahora tengo una barbacoa en casa de un agregado del Opus Dei que se muda al norte de España, ya jubilado. Un profesor que solía venir a la misa del hospital antes de la pandemia.

Mi obra favorita de El Prado es El Jardín de las Delicias de El Bosco.

martes, junio 14, 2022

Propuestas para los santos óleos

 

Como este blog lo leen un cierto número de sacerdotes, me gustaría dar una sugerencia para las sacristías de las catedrales. Todos los años, en la misa crismal, se consagran los nuevos óleos y los previos se retiran.

En la mayor parte de los lugares los óleos se entierran en algún terreno de la catedral, sobre tierra que no se pise. La primera sugerencia viene aquí: sería mejor tener una lámpara de aceite, una de especial dignidad, que se usase para este menester: consumir los óleos consagrados el año anterior. Puede colocarse delante del sagrario, por ejemplo.

Pero otra opción que me parece mejor, pues muestra mayor reverencia hacia los santos óleos, sería la siguiente: Se consagran los nuevos óleos en la misa crismal, pero se siguen dando a las parroquias los óleos antiguos hasta que se agoten. Una vez agotados se procedería a dar los nuevos.

Esta praxis sería conocida por los sacerdotes. De manera que las parroquias, a su vez, seguirían usando los antiguos óleos hasta agotarlos. De manera que no habría que “eliminar” los antiguos ni en la catedral ni en las parroquias.

En las parroquias los óleos muchas veces están en recipientes con algodones impregnados. De manera que la opción de consumirlos en una lámpara en la iglesia no es factible.

¿Estamos hablando de muchos litros que tienen que ser eliminados cada año? Sí, si consideramos mi diócesis, solo en las parroquias ya estamos hablando de bastante más de diez litros que de esta manera se ahorrarían. Diez litros que tienen que ser renovados, es decir, eliminados.

En el sistema que propongo, no se perdería nada. Es cierto que, en las parroquias, la renovación de los óleos antiguos podría retrasarse dos meses o cuatro. Pero considero que el sistema que propongo es una forma de mostrar respeto a algo tan sagrado.

Si alguna vez alguna parroquia no renueva los óleos hasta medio año después de la misa crismal, tampoco pasa nada en cuanto que los óleos tardan más tiempos en volverse rancios siempre que no estén expuestos al sol en un recipiente transparente.

Este sistema que propongo permitiría consagrar una cantidad más aproximada al gasto cada año, pues ya no habría que llevarse a la parroquia lo que se precisa más un margen.

Una última sugerencia que ya hice en este blog. Cada año podría variarse la mezcla de perfumes para el santo crisma. Sería muy bonito que el obispo en su sermón (o si no el maestro de ceremonias antes de la misa) explicase qué perfumes se van a usar cada año y qué simbolismo hay en ello.

Durante varios años se pueden usar perfumes que aparezcan en la Biblia y que puedan identificarse con seguridad: cinamomo, gálbano, estacte, áloe y otros.

Dado que siempre leemos la Biblia, sería un servicio que antes de esa misa no solo los sacerdotes, sino también los fieles, pudieran olerlos en alguna capilla y saber en qué versículo aparecen. Siempre hemos oído hablar del nardo, pero yo solo lo olí en mi madurez.

Lo mismo pasa con el incienso. En misas importantes se podrían usar distintos tipos de incienso en cada comento de la misa. Bastaría con tener sobre una mesa tres navetas.

Hablando de diferencias. Hago notar a los sacristanes que el aceite de oliva puede ser dorado, claro o verde. También el color distinto del aceite y su diversa procedencia puede dar lugar a reforzar el simbolismo propio de cada santo óleo.

lunes, junio 13, 2022

Geopolitica y esperanza en Dios

 

Esta foto es ganadora de un Premio Sony. He reescrito, completamente, este post. En la primera redacción desgranaba los puntos del mapamundi en los que se estaban formando nubes que podían descargar tormentas. En cuatro lugares hay nubes que lo mismo se deshacen, que lo mismo descargan en forma de enfrentamiento bélico.

De todas esas concentraciones de nubes con densidad suficiente para formar una tormenta, la única segura es la tempestad que se va preparando en el Mar de China. Pero, en cualquier caso, vivimos una época en la que las tensiones se van acrecentando. Lejos de vivir un tiempo de armonía en el que los lazos humanos se van estrechando en buena sintonía, vivimos tiempos de crecientes tensiones. Como siempre… perdón, no siempre, pero como era de esperar, la invasión de otro país es más propia de la decisión de un tirano, no es lo propio de una democracia sana.

Ahora nuestro gobierno quiere cambiar el derecho de conciencia del personal sanitario a no practicar abortos. ¿Qué puedo decir? Más allá de las ideologías, no hay ninguna duda acerca de cuál es el talante de nuestro presidente del gobierno. Mi compromiso a respetar a otros que no piensen como yo es total, pero otra cosa es la valía personal del que hoy día rige los destinos de país. Sean cuales sean los combates de la arena política, ha dejado bien claro, tantas veces, cuál es su actitud hacia la libertad.

Os lo vais a pasar bien

 

El vídeo que hoy os comparto es tan bueno (y un poco largo) que por eso no os entretengo escribiendo. Que lo disfrutéis:

htts://www.youtube.com/watch?v=A7tikkWLBE8


sábado, junio 11, 2022

Llenando vacíos

 

Como ya advirtió Niulka, la novela sobre el exilio de los judíos se está alargando; gozosamente se está alargando.

Varias cosas me llaman la atención de este mundo en el que me estoy sumergiendo si lo comparamos con mi novela Cuando amanezca la ira.

La primera es que el Egipto faraónico era una realidad más compacta, más orgánica. La realidad de los tres reinos mesopotámicos de la época de Jeremías y Daniel es mucho más diversa. Para empezar, son tres reinos bastante distintos que se suceden, nada que ver con un simple cambio de dinastía como en Egipto. Las realidades que compusieron aquel Egipto eran mucho más uniformes. El Poder en Mesopotamia es algo mucho más heterogéneo, menos cohesionado.

El segundo aspecto que me ha sorprendido es lo bien que se puede llegar a conocer la época de esplendor egipcio. Los artículos, los libros, son sensacionales a la hora de presentar un cuadro completo. Por muy misteriosa que sea esa civilización, tenemos el cuadro completo.

Mientras que en Mesopotamia vemos el cuadro de una sociedad con muchos más vacíos, con muchos más espacios oscuros. Soy consciente de que si esto lo lee un experto, me dirá que es porque no lo conozco. Y tendría razón en decir que soy un aficionado. Ahora bien, si comparamos el inmenso volumen de literatura histórica, sociológica, económica de ambas sociedades tengo esa sensación: que en la balanza, la sociedad egipcia queda mejor dibujada en todos sus contornos y perfiles.

Todos esos vacíos hay que llenarlos con reconstrucciones plausibles, reconstrucciones documentadas. No inventa de igual manera el que no conoce bien una civilización que el que la conoce muy bien.

Por ejemplo, ¿cómo evolucionó el Templo de Jerusalén desde su construcción hasta la primera toma de Jerusalén? Estamos hablando de un periodo de tiempo de casi 400 años.

Cuando era seminarista, hubiera contestado que se mantuvo estable puesto que su diseño era un mandato de Dios. Ahora sabemos que ¡hasta el altar fue reemplazado por un altar de estilo asirio! Increíble. ¡Hasta el altar! Esta noticia la ofrece un pequeño recodo del segundo rollo del Libro de Reyes.

Tratar de imaginar cómo evoluciona arquitectónicamente, a base de ampliaciones, ese conjunto sacro es una tarea deliciosa, casi suculenta de imaginar.

viernes, junio 10, 2022

Cosas varias

 

Os pongo este vídeo para que veáis a un obispo vistiéndose para oficiar la eucaristía.

https://www.youtube.com/watch?v=21oE6mJUTAY

Y ahora podéis ver este vídeo con la vestición de un obispo de rito oriental:

https://www.youtube.com/watch?v=WKLxTWs886s

Ayer hablé con un amigo mío por teléfono (que estaba leyendo una segunda novela mía) y me dijo un dicho inglés muy interesante: La historia no se repite, pero rima.

Hago notar que la palabra “historia” ya no se escribe con mayúscula en español. Tampoco “rey”, “papa” o “presidente”. Me costó un poco no escribir “papa” con mayúscula, me parecía una medida de respeto. Pero reconozco que la razón objetiva es válida para todos los cargos.

La gramática no puede convertirse en una selva cargada de excepciones. Lo mejor es simplificarla. De ahí que lo mejor sea que los cargos y funciones todos con minúscula. No había verdaderas razones para las mayúsculas en los cargos.

jueves, junio 09, 2022

Los achaques de la edad

 

La foto es ganadora de un premio Sony de 2018. Estoy muchísimo mejor de mi hernia discal. No sabéis lo duro que fue levantarme por la noche para ir al aseo y darme cuenta de que no era cuestión de aguantar el dolor, sino de estar al borde de la imposibilidad absoluta de andar. 

No importaba lo lento que anduviese ni que me agarrara a los marcos de las puertas y descansase. No importa que hiciera descansos. Era la posición erguida la que presionaba el nervio de un modo tan espantoso que en algún momento pensé que iba a perder el conocimiento.

Por la noche apenas dormí. Al día siguiente casi no pude trabajar en el ordenador, menos mal que no tenía hospital. Con ese dolor no podía ni descansar viendo la televisión.

Ahora ya no lo necesito, pero un conocido me ofreció venir a mi casa e inyectarme un antiinflamatorio en la espalda. De haberlo sabido, se lo hubiera pedido.

Qué suerte tengo de estar en esta época. Cuando pienso si hubiera sufrido esto hace siglos, cuando lo único que podía hacer la medicina era constatar el hecho, no quiero ni imaginarlo.

Este último episodio me produce una cierta inseguridad, porque esta vez no levanté ningún peso ni hice ningún esfuerzo. Fue un movimiento ladeado de lo más normal, sin brusquedades. Kennedy tenía el mismo problema. Alguna vez el servicio lo encontró tumbado en el suelo tratando de mitigar el dolor.

He dudado si ponerlo, porque es un poema muy duro, que parece sin esperanza, parece el lamento propio de un pagano. Pero es un poema bellísimo. Es de Gloria Fuertes y se titula: ¡Hospital-Asilo de ancianos pobres!:

Viven mucho.

Algunos no tienen nada más que años…

Allí están solos y aún vivos, solamente esperando.

Viven mucho.

Valen tan poco que ni la muerte los quiere.

Desde el Evangelio este lamento se ilumina con esperanza.


miércoles, junio 08, 2022

Vaya, ¡qué composición!

 

La foto es ganadora de un premio Sony de 2018. Como siempre que comienza el mes de junio, desayuno un cuenco de cereales con hormigas. Me someto a las inclemencias estacionales con resignación. Son unas hormiguitas muy pequeñas, simpatiquísimas. En serio que les he cogido cariño.

No les gustan todos los cereales, no. Como los niños, van al trigo inflado con miel. Este sabor les pirra. Puedo asegurar que no añaden ningún tipo de sabor. En los copos de maíz sin azúcar nunca encuentro una sola hormiga, a pesar de estar cerrados al lado.

Ya se ve que las dobleces de la bolsa de plástico y las dos pinzas no son obstáculos para estas briznitas de vida tan perseverantes, tan trabajadoras, tan humildes. Las chinches del colchón no tienen admiradores. Las hormigas, sí.

Especialmente durante el verano, el primer plato de mi almuerzo y cena, con mucha frecuencia, es un batido. Una ciruela madura, de esas que chorrean jugo al morderlas. Normalmente de color negro. Dos albaricoques pequeños. Son tan bonitos con su color naranja. Su tacto es aterciopelado. Y una nectarina. Toda la fruta tiene que estar en su punto de madurez. Lo ideal en esta receta es poner fresas. Le dan un sabor inigualable. Pero solo las hay hasta mediados de mayo.

Esta fruta la condimento con una generosa cantidad de canela en polvo, y algo de jengibre. Le pongo kéfir (lo hago yo mismo) o en su defecto algún yogur cremoso. Se bate bien y el resultado es delicioso. No necesita que se le añada nada de azúcar. La fruta natural ya tiene la suya propia.

Esta es una manera agradabilísima de tomar mucha fruta todos los días. Ideal para los niños y para el padre Fortea.

Si vienen visitas se le puede poner un cuadrado de chocolate negro o una cucharada de helado de vainilla, antes de batirlo.

No lo pretendía, pero hoy me ha salido un post totalmente happy flower.

martes, junio 07, 2022

España tiene una peculiaridad con los nombres de pueblos

 

La foto es ganadora de un premio Sony de 2018. Algo de lo que me enteré al escribir mi Paulus era la repetición continua de nombres propios de personas que se daba en Roma. Me resultó tan llamativa esa costumbre de no salir de los márgenes de lo conocido, de lo que resultaba familiar. Un sistema para nombrar a las personas que era un sello de pertenencia al grupo.

La otra cosa de la que me enteré al escribir mi novela fue que esa costumbre se llevaba también a la toponimia de poblaciones. Los nombres de ciudades fundadas por los romanos se repetían continuamente. Eso no era privativo de los romanos. Solo hay que ver cuántas Alexandrias, Antioquias y Neapolis existen. Pero estos son solo los ejemplos más evidentes. Muchos nombres menos conocidos también se repiten con una frecuencia llamativa.

La costumbre de repetir nombres de poblaciones se comprueba en muchos países. España es la excepción. Somo uno de los países del mundo donde cada pueblo, por pequeño que sea, tiene su nombre único. Ciertamente hay unas cuantas excepciones, pero la proporción es muy inferior a la de otros países.

Nos gusta tan poco la repetición de un nombre de población que en 1916 la Real Sociedad Geográfica cambión más de un millar e nombres de los 9 200 que existen en España. Pero, aunque se hubieran dejado, los nombres repetidos son muchos menos que en cualquier otro país vecino.

Agradecemos todos a Juan Julio la noticia de la Fundeu sobre la conveniencia de usar Cirilo en vez de Kiril al hablar del patriarca ruso. Aunque el artículo no dice que sea incorrecto usar el nombre original, solo preferible. Por lo menos, esa es la impresión al releer el artículo. Pero le agradezco la puntualización que es totalmente pertinente.

En el campo de canciones que dan alegría, no podía faltar esta. Qué misterio, ¿cuál será?:

https://www.youtube.com/watch?v=QErPom-F2t0

lunes, junio 06, 2022

El Yo de Dios y el yo del hombre


Hace varias semanas hablé del Yo de Dios frente al yo del hombre. Hoy he encontrado que había escrito algo más sobre ese asunto. Lo pongo ahora:

El cristianismo ofrece una relación perfecta entre el yo y el Yo de Dios. Esa relación se basa en la verdad, es decir, en lo que son las cosas.

Adecuarse a la verdad tiene repercusiones en el modo de relacionarse el propio yo con el resto de yoes. No es más libre por prescindir de la verdad. No se es menos libre por someterse a la verdad. El cristianismo es el reconocimiento del ser de las cosas. Es el reconocimiento, la aceptación, la obediencia tras la revelación, tras la manifestación, tras el resonar de la palabra de un Yo Absoluto.

Es cierto que si en el universo no existiera un Yo Infinito, en ese caso el propio yo se podría convertir en medida de toda verdad. Sin una referencia absoluta e incuestionable, la referencia pasaría a ser relativa.

El cristianismo ofrece cómo ha de ser la relación entre yoes, hablemos de la propiedad privada (Rerum Novarum) o de la sexualidad (Humanae Vitae), porque de la relación entre el yo y el Yo surgen ramificaciones, conclusiones y gradaciones entre lo ilícito, lo recomendable y lo perfecto.

La relación entre el yo y el Yo tiene infinidad de consecuencias, pero hay que admitir que en esa relación entre el yo y el Yo, es el Yo Infinito el que determina esa relación entre dos sujetos. Un Yo Absoluto determina de forma absoluta esa relación, no puede ser de otra manera.

Prescindir de la verdad implica, antes o después, el choque con la realidad. Ese choque ocurre por el lado del mal, pero también por el lado del bien. Y es que, en el cielo, el ingreso a la visión del Yo Absoluto siempre será un impacto, un choque ontológico, entre la una Realidad de Dios y la minúscula realidad del propio yo. Antes del cielo cualquier relación entre los dos yoes debe partir de la aceptación de ese hecho.

La libertad que presenta el cristianismo no es solo “un yo”, sino un “yo y un tú”. Eso es así hablemos de la paz en el hogar familiar o de Derecho Constitucional. La libertad frente a la Ley de Dios es la armonía perfecta con ese Tú Divino. Es una libertad “en” la Ley de Dios, no “frente” a la Ley de Dios.

El pagano se coloca frente a la Ley de Dios y la examina, y llegará a sus propias conclusiones. El cristiano se inserta en esa Ley de Dios. Esa ley no se entiende ni se vive como algo que coarta, sino como la expresión de la verdad de la realidad. Someterse a la Ley de Dios, por duro que pueda ser en determinados momentos, pasa a ser el modo de evitar el choque con la realidad. Someter el yo al Yo, al final, siempre, es lo mejor, sin excepciones. El sometimiento a la realidad no admite excepciones.

Normalmente la no aceptación del ser de las cosas (esto engorda, debo hacer ejercicio, no abuses de esto) suele implicar aspectos no muy graves, decisiones de consecuencias no muy graves. Pero la no aceptación puede tener implicaciones inmensas. Hay yoes que han cambiado la historia: Hitler, Stalin, Napoleón. Jomeini cambió el destino de Irán. Un Irán democrático y tolerante hubiera cambiado toda la historia posterior de la región.

A veces las decisiones tomadas por un solo yo cambiarán la vida de millones de yoes durante generaciones. Sabemos que las decisiones del Yo Absoluto corrigen, enderezan, las cosas para que las decisiones malas encuentren una barrera y el incendio sea contenido.

Ahora mismo el yo más poderoso, la voluntad que más poder tiene para hacer virar la historia, es la de Xi Jinping. Ningún ser humano en este año de 2022 tiene una acumulación de poder puro y duro como él. 

La realidad es que hay un Yo Todopoderoso que vela para que este planeta no se convierta en una selva de yoes, una selva regida por la ley del más fuerte, una selva de agresividades, de acumulación de egoísmos, una selva en la que unos devoran a otros: sexualmente, monetariamente, por placer sanguinario.

No nos damos cuenta, pero estamos más protegidos de lo que creemos. En realidad, estamos totalmente protegidos. Cualquier cosa que el Yo permita que suceda, será para bien de sus hijos. No puede ser de otra manera. Todo, siempre, está bajo control. 

♣ ♣ ♣

Pongo a continuación lo que escribí sobre este tema del yo hace unas semanas y que ya puse en el blog:

Mi yo frente al Yo de Dios. Lo que determina la relación entre estos dos yoes, entre la independencia de estas dos voluntades, es la verdad. Incluso el amor se presenta a mi entendimiento como verdad. Es la verdad lo que determina a mi yo frente a la total indiferencia en relación al otro Yo.

Sin la verdad cualquier decisión frente al otro sería lícita. O mejor dicho ya no existiría ni licitud ni ilicitud. La relación entre los dos yoes debe basarse en la verdad. Cualquier atentado, deformación, indiferencia con respecto a la verdad tendrá consecuencias en mi yo. Basarse en otra cosa que la verdad siempre acarreará perjuicios.

Y la verdad me llevará a entender que debo encontrar mi yo en el Yo de Dios.

♣ ♣ ♣

El yo puede volverse un agujero negro. Eso se ve muy claro cuando el yo es investido de poder absoluto sobre una nación. Pueden hablar de amor a Alemania, de patriotismo por Rusia, del bien de la humanidad en Camboya (Pol Pot), pero en el fondo es el yo revestido de excusas, de andamiaje, de decorado. Es el yo revestido de un gran decorado, decorado de excusas.

En este tipo de casos se produce un cambio cualitativo en el interior del yo, en el modo de ser del yo, pues el yo cambia. Decía que se transforma en un agujero negro porque todos los demás yoes se sacrifican al propio yo, se miden por el propio yo. No hay límite en la cantidad de yoes que tengan que ser aniquilados por mi yo. Este tipo de sujetos no piensan en la otra vida. Creen que los envían a la nada. Y a pesar de creer eso, lo hacen sin dudarlo.

¿Y si las cosas salen mal? Este tipo de yo no admite que pueda acabar en una celda tras una sentencia de un tribunal internacional. Si las cosas salen mal, están convencidos de que tienen una salida siempre a mano: la aniquilación. Si tanto dolor, si tanta aniquilación ajena (a veces decenas de millones de yoes), no sirviera para nada a la postre, ¡mi yo dejará de existir!

Lo que no se admite es que el yo sea confinado a los estrechos márgenes de la realidad, una celda. Si una nación entera se vuelve estrecha para ese sujeto, una celda no entra dentro de lo admisible. Como el yo no admite la realidad, piensa que siempre le queda la escapatoria de la realidad, la nada. El final de este proceso es que tras enviar a la nada a muchos yoes (así lo piensa el tirano), el mismo yo se arroja a la nada. Un final previsible para ese conflicto entre realidad y yo. Así se evita la aceptación de la verdad, el choque entre la objetividad de la realidad, y el subjetivismo del individuo.

El que ha ido repartiendo muerte acaba siendo invadido por la muerte. En esa expansión del propio sujeto, en la que la nación se queda pequeña, siempre acaba habiendo un choque con la realidad. Y es esa realidad la que no se admite.

♣ ♣ ♣

Es interesante que soy un yo, y Dios es otro yo, aunque en su caso hablemos de un “Yo”. Pero la mayúscula no nos debe despistar, está totalmente justificada; pero, al fin y al cabo, es un “yo”.

Él y mi persona somos dos yoes. Por muy poca cosa que sea mi persona, por poquísima cosa que sea, soy un yo. Por grandioso que sea el Ser Infinito, es un yo. Toda mi poquedad y miseria no me quita el que ahora mi persona sea un yo. Toda su grandeza puede ser infinita, pero Él es un yo, y mi persona es otro yo. Lo repito: somos dos yoes.

Esto no peca de falta de respeto, porque es Dios mismo el primero en tomárselo en serio. Si alguien se toma en serio el “yo” que no es Él, es precisamente Dios. El Yo que es el Altísimo jamás anula al yo de la criatura.

Impresionante, con todo lo grande (ontológicamente) que es Él, es un Yo. Y con todo lo pequeño que soy, soy un yo, auténtica y verdaderamente. Y Dios nos asegura en su Palabra que mi yo seguirá existiendo siglo tras siglo, para siempre. El Yo divino no suprimirá mi existencia siendo yo.

domingo, junio 05, 2022

Ayer no hubo post

 

Ayer tuve una visita justo después del almuerzo que se quedó hasta la hora de la cena. A cenar fui a un cóctel que ofreció un amigo de la infancia que cumplía 50 años.

Una fiesta amenizada por cantantes de ópera con Alina, una ucraniana al piano. En cuanto fue presentada y se nos dijo su nacionalidad, todos aplaudieron con verdadero afecto que le emocionó.

Las bandejas fueron pasando: croquetas, trocitos de pimiento para untar en humus, minihamburguesas, etc. Menos mal que no había tarta. Que empalagosas me resultan esas tartas que son mero bizcocho y nata. Había dos personas de Barbastro. Llegué a mi casa algo después de la medianoche y con muchísimo sueño. Resultado: que no me acordaba que no había escrito el post.

Gracias a Dios, siempre me duermo muy rápido. Normalmente antes de un minuto tras acostarme. Pero cuando tengo sueño, no podría contar ni cinco. Es meterme en la cama y solo darme tiempo a darme media vuelta.

Por alguna razón extraña, al cabo del año, siempre tengo tres o cuatro noches de insomnio. Varias causas ya las descubrí hace años. Descubrí que varios alimentos, a partir de cierta cantidad, hacen que me desvele. El calor del verano también es una causa de muchos insomnios, además de esas tres o cuatro noches.

Ningún vídeo de mi canal como el último sobre Putin ha tenido una acción tan patente de las granjas de troles rusas. Granjas que, como todo el mundo sabe, están en Venezuela. Para habla española están en Venezuela y tal vez algunas en Cuba.

Lo que más gracia me hace son los clásicos:

Hasta ahora he seguido este blog (o este canal), pero a partir de hoy (cuando uno dice algo sobre Putin) ya no voy a volver.

Por supuesto que vuelven, vaya que si vuelven. Al día siguiente ocupa su lugar en la trinchera otro desconocido, con otro nombre de usuario, pero con igual retórica. Algunos hay que no cambian de nombre y llevan despidiéndose catorce veces.

Otro clásico es que entonces otro usuario (otro trol) le pone la mano en el hombro y le dice con una lagrimita en el ojo: Yo te comprendo, hermano. Me pasa igual que a ti.

Después hay otro tipo de troles que optan por comenzar con estas palabras: Con todo respeto… yo le respeto mucho a usted… y así. Después se despachan a gusto como lo que son, contratados por el régimen.

Hace años, cuando empezaron, era demasiado fácil detectarlos. No importaba de qué tratara el post, siempre empezaban con estas palabras: Pero con tantos problemas como hay en España, ¿cómo critica lo de fuera? Y ponían algún tema de actualidad que desviara los comentarios siguientes hacia otros asuntos. El problema es que usaban mucho el corta y pega, y veías esos comentarios repetidos, palabra por palabra, en varios blogs.

Pero ya detectaron que eso era demasiado fácil de descubrir y hace años que no lo hacen.

Llevo años leyendo comentarios de mis lectores y os aseguro que infinidad de comentaristas de mi último vídeo sobre Putin son comentaristas pagados.

viernes, junio 03, 2022

La novela ya va dando pasos

 

Karina, gracias por tu comentario. Conozco bien la estrategia de asedio romano en la época imperial. Entonces se contaban con medios de asedio y con instrumentos balísticos para proceder con mucha mayor eficacia. Pero el siglo VI a.C. era otra cosa.

Sí que le agradezco especialmente a Carlos su dato sobre la población del Reino de Judá y la mención de un libro que leí para mi Paulus y que ya no recordaba. En mi novela había estimado en unos 100 000 habitantes el Reino de Judá. Pero había sido una estimación provisional, muy provisional.

Hoy he descrito la entrada de Nabucodonosor en Jerusalén. La primera toma de la ciudad, hubo una en el 597 a.C. y una segunda en el 584 a. C. Pero el Templo en esa época no pienso que fuera muy impresionante a los ojos de alguien venido de Mesopotamia. Por eso la parte del ingreso del rey babilónico en el santuario me ha salido un poco soso.

Lo de Putin no es un mero pecado. Es un pecado que cada día trae nuevos pecados a través de los esbirros que llevan a cabo su voluntad.

Es una decisión que conlleva nuevas decisiones cada día, decisiones de sufrimiento, de muerte, de destrucción, de secuelas que perdurarán una vida entera.

¿Dónde están hoy los huesos de Gadafi? ¿Dónde está el cuerpo de Sadam Hussein? ¿Dónde estará Vladimir dentro de un año?