lunes, junio 05, 2023

Reparación en el Vaticano

 

Un hombre se desnudó y subió al Altar de la Confesión de San Pedro del Vaticano. ¿Queda profanado el altar por ese acto? Indudablemente, no.

Lo correcto sería decir que se ha cometido una afrenta contra el ara, pero no ha quedado profanado. La acción de ese hombre puede ser muy lamentable, pero eso no deja una “mancha” sobre el altar; de ningún modo se debe volver a consagrar.

Entonces ¿no se hace nada? No, algo hay que hacer en reparación, pues un altar es algo muy sagrado. En mi opinión, lo que ha realizado el cardenal-arcipreste de la basílica es más suficiente: ha rezado el credo y ha aspergido el ara con agua bendita. Creo que es una acción perfectamente proporcional.

domingo, junio 04, 2023

Mejorando la democracia

 

Desde hace no poco tiempo, le doy muchas vueltas al tema de la democracia. Leo, escucho conferencias, lo hablo con amigos. La democracia (en tantos lugares) ha logrado la alternancia en el poder, el Estado de Derecho, unos jueces independientes, unos gobernantes no despóticos.

Pero es como si después de lograr tantas e indudables consecuciones, la democracia se hubiera estancado; como si el sistema hubiera logrado eso, pero no lograra que los más adecuados gobernaran; como si el sistema se hubiera enzarzado en luchas grupales (partidistas) que son el obstáculo para tomar las mejores decisiones en orden al bien común. Se ha logrado mucho, pero nos hemos estancado.

El sistema no logra mejorar ni la calidad de los gobernantes ni que sus decisiones sean las más adecuadas.

Los partidos políticos son inevitables, convenientes, necesarios, instrumentos útiles para la ciudadanía. Las élites especializadas en la política, como ejercicio profesional, también son necesarias. Pero también es verdad que la lucha entre partidos puede convertirse en un mal endémico del bien común, del acuerdo, de la racionalidad. La lucha entre partidos puede bloquear lo que debería ser el modo normal de tomar las decisiones.

Hace unos años propuse la opción de la candidatura universal. 

En La decadencia de las columnas jónicas, explicaba yo que en las elecciones generales se puede votar por cualquier ciudadano español, ya que deja de haber candidatos oficiales: cualquier ciudadano puede votar a cualquier ciudadano español que sea mayor de edad.

El que obtiene el 1% de los votos pasa a ser congresista. Los que obtienen menos de ese porcentaje pueden dar sus votos al que consideren más adecuado. Lo que se pretende con tal medida es que esa agrupación de votos, esa lenta decantación, logre que se acabe sumando un 1%.

Pero yo mismo tengo mis dudas. Lo propuse y yo mismo tengo dudas. ¿Es el destino de toda democracia alcanzar un punto de rivalidad egoísta que lleve al bloqueo partidista?

Tengo la sensación de que un 25 % de congresistas completamente independientes podría marcar una notable diferencia con el panorama actúa de casi todos los países. Ese 25 % actuaría como jurado independiente: su sentencia daría la presidencia al candidato que vieran menos malo; ya no digo óptimo, pero sí el menos malo.

Lo malo es que un voto independiente y secreto se podría prestar a la compraventa de votos. Aunque al ser secreto, no habría manera de comprobar que un congresista ha cumplido con su parte del trato.

         Lo que tengo claro es que los actuales bloqueos partidistas (de un partido radicalmente contra otro) solo se pueden superar con la afluencia de ciudadanos independientes al parlamento, no con la creación de otro partido más que entre en el juego de alianzas absolutas: nosotros seremos los buenos, hagamos lo que hagamos; vosotros seréis los malos, hagáis lo que hagáis.

         Sería bueno llenar el hemiciclo de escritores, periodistas y gente famosa. Eso ya sería un paso adelante para cambiar las cosas. Además, con mi sistema de candidatura universal, el 10 % de los votos pueden ser entregados a familiares y amigos que no harán nada. Si se pierde, incluso, el 20 % de los votos, los parlamentarios serían 80. Es más fácil entenderse entre ochenta personas (de las cuales otros veinte serían independientes) que no entre los 345 diputados que ahora componen el congreso de España. 345 diputados que disputan un partido de fútbol en el que la política se reduce a dos porterías y un solo balón.

         Si hay 80 diputados, eso puede significar que 20 son independientes, y 30 son de partidos de un bando y otros 30 de partidos de otro bando ideológico. Con esas proporciones resulta fácil obtener la presidencia con el apoyo de los independientes. La antigua política de enfrentamiento, como si fuera un torneo medieval, poco a poco, iría derivando hacia una política de colaboración, de acuerdo.

Ahora tenemos en casi todos los países este panorama: nula colaboración, elecciones, nula colaboración, elecciones. El sistema que propongo con pocos parlamentarios que parlamentan a puerta cerrada y con voto secreto, desde luego, se presta al acuerdo colaborativo. No digo que se logre, pero el sistema lo favorece. Y mucho más si los independientes logran imponer (aunque sea de vez en cuando) presidentes de gobierno no políticos, individuos independientes que no vengan a hacer lucha política, sino a resolver problemas.

Sí, el sistema de candidatura universal creo que sería un paso en la dirección adecuada para resolver los problemas de nuestras democracias.

El sello de lacre como expresión de autoridad

 

Resulta evidente que los documentos de siglos pasados tenían una belleza evidente, que no había que explicar, resultaba patente. No importaba si se trataba de un testamento o de una escritura de un terreno. Pienso que las cancillerías de las diócesis deberían intentar que los nombramientos de párrocos fueran documentos del estilo del que puse ayer: sobrios, sencillos, pero artísticos.

Alguien puede pensar que se trata de una cuestión de dinero. Es decir, que con dinero se podría obtener; pero que hay que gastar dinero. Muy por el contrario, hay personas dispuestas a hacer esto por amor a la Iglesia sin pedir nada a cambio.

Por último, llamo la atención acerca de la belleza de los sellos de lacre. Un sello de lacre en un nombramiento de párroco es un signo de autoridad, además de ser algo bello.

El sello puede venir colgando del documento o cerrando el sobre con el nombramiento. Hoy día hay materiales más baratos y fáciles de manejar que el lacre.

El caso es que un nombramiento de párroco es algo que tiene una significación espiritual. Entregar esa voluntad episcopal de un modo bello y noble me parece muy adecuado.

viernes, junio 02, 2023

Me encantaría que los nombramientos diocesanos estuvieran escritos en un documento de este estilo

La zarzuela española es mil veces más divertida que Wagner con todos sus rollos acerca del enano nibelungo Alberich o la hija desleal de Wotan. Y si no escuchad este gracioso diálogo de El año pasado por agua:

https://www.youtube.com/watch?v=KAtOZvClE98

Ojo, reconozco que las oberturas de Wagner son grandiosas. Pero uno va listo si hay que escuchar toda la tetralogía, para disfrutar la obertura de Tannhauser o la de Lohengrin y unas quince piezas más así.

Después de horas de tedio uno escucha la zarzuela de los dos vejetes cantando Es que hoy en día las ciencias avanzan que es una barbaridad y no hay punto de comparación.

https://www.youtube.com/watch?v=cn-embVPHlg

Reconozco que la música de Wagner es insuperable como música de fondo en los documentales sobre el final del III Reich.

La semana pasada descubrí la presentación de Lamparilla (minuto 4:32 del vídeo de abajo). Qué simpático cuando comienza cantando: Yo fui paje de un obispo. y criado de un bedel, y donado de un convento. y ranchero en un cuartel.

https://www.youtube.com/watch?v=j6kPzFevLcw

Cada vez que te pidan un curriculum, sin duda te entran ganas de cantar tu experiencia laboral de esa manera.

jueves, junio 01, 2023

Las revisiones, ese fastidioso (pero inevitable) camino en la construcción de un libro


Hoy me he encontrado con una anotación del tiempo en que me encontraba escribiendo mi novela sobre Egipto. En la primera redacción, había situado los hechos en verano. Después me doy cuenta de que, en el texto del Éxodo, al describir la plaga del granizo, se habla de la recolección de la cebada y el trigo. Cambio las fechas.

Después las vuelvo a cambiar para que la salida del pueblo elegido ocurra en la fecha de Pascua. Se me había pasado ese “pequeño” detalle.

Después me percato de que es mejor que la salida ocurra cuando es más frecuente que caiga la fecha de Pascua y no en uno de los extremos de esa oscilación.

Por último, en la última revisión, me doy cuenta de que si los hechos comienzan a finales de enero el faraón no puede nadar en el Nilo en esas fechas, como había colocado en la primera redacción. No solo eso, también hay que cambiar las vestiduras en muchos pasajes para adaptarlas a una época más fría.

Finalmente, decido que todo el ciclo de las plagas, en vez de durar 70 días (así era en mi primera redacción), podrían durar 40 días.

miércoles, mayo 31, 2023

Bonito jardín de musgo

 

Quizá este post vaya a ser de más interés para los que hayan leído mi libro La Catedral de San Abán. Hace unos días estaba pensando que un complejo de ese tipo podría albergar una particularidad que me parecería entrañable, y es que dentro del templo se mantuviera para sus velas y lámparas el fuego sagrado de Jerusalén. Hay toda una preciosa historia acerca de este fuego que os animo a que la busquéis en la Red. Pero si lo deseáis, podéis verlo en este link:

https://www.youtube.com/watch?v=TxzT8fNMqNQ

Sería bonito que la llama que arda delante del sagrario principal de esta catedral proceda de este fuego traído del lugar de la resurrección de Cristo. Ese fuego, actualmente, se lleva a varias catedrales ortodoxas del mundo.

En la Catedral de San Abán podría haber varias lámparas en distintos lugares del templo que mantuvieran ese fuego. Algo que me parece muy simbólico y que aseguraría que, aunque una lámpara se apague, haya otras que lo mantengan.

No haría falta traerlo cada año, sino solo conservarlo.

♣ ♣ ♣

Otra cosa que me parecería muy simbólica es que, durante la misa crismal, el obispo, al confeccionar el santo crisma, mezclara un poquito de santo miron procedente de la catedral del patriarca copto de Egipto. Sería todo un gesto de hermandad. Además, ellos bendicen ese óleo con muchísimas oraciones y mezcla de hierbas y esencias.

La cantidad podría ser el equivalente a tres cucharadas de óleo. No es algo solo simbólico, sobre ese aceite ellos oran muchísimo y, sin duda, está cargado de bendiciones.

Mejor todavía si se añadiera a los tres santos óleos (de la misa crismal) una pequeñísima cantidad de aceite emanado por el cuerpo de un santo (yo solo conozco que esto sucede con el cuerpo san Charbel, en el Líbano) o de un icono o imagen santa; en el mundo hay varios que han emanado aceite varias veces en los últimos años.

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Ya puestos, se me ocurrió una tercera particularidad para San Abán, una tercera particularidad en lo relativo al agua bendita, esta sería la última cosa peculiar. Esta particularidad sería que el agua que se usa para el primer y segundo aclarado (sin jabón) de los purificadores, corporales y manteles de los altares se reserve para ser bendecida y colocada en la gran pila de agua bendita (de tres metros de diámetro) que hay a la entrada de la catedral, en recuerdo del Mar de Bronce.

Si los antiguos judíos eran aspergidos por la sangre del cordero pascual, sería muy simbólico que los cristianos se santiguasen devotamente con esta agua santa por haber estado en contacto con las partículas de esas telas. El simbolismo neotestamentario con la sangre aspergida del Antiguo Testamento resulta muy claro.

Además, cada vez que haya bautizos en la catedral, una parte de esa agua se conservará en la pila bautismal, y otra parte se derramará en esta pila mayor de la entrada y en otras menores situadas en otras puertas de acceso al templo.

El agua que se retira cada semana no se tirará en cualquier lado, sino que se derramará en las macetas cercanas de algunas hiedras interiores, o mejor todavía crear un minúsculo, pero precioso, jardín de musgo.

martes, mayo 30, 2023

Detalles de la candidatura universal

 

No sé quién diseñó el interior del Parlamento Vasco, pero habría que darle un 10. De las que conozco, es la tercera cámara que más me gusta del mundo. Mirad el parlamento europeo y veréis que cámara tan anodina. La vasca tiene unas dimensiones humanas, proporciones perfectas, crea un ambiente agradable.

♣ ♣ ♣

Quería responder a la pregunta de LEK:

¿Cómo se organizaría esa candidatura universal? Si hay un exceso de candidatos variopintos, ¿cómo se puede organizar esa marabunta?

Respondo a esta cuestión por si queréis hacer sugerencias. Todos los ciudadanos estarían en una base online, con su nombre foto y algunos datos más. Lo mejor es que estuvieran todos, pero podrían estar solo aquellos que quieran recibir votos.

En este segundo caso, lo único que se precisaría para aparecer en esa base de candidatura electoral sería ir a una comisaría de policía o al ayuntamiento y pedir la inscripción. El proceso debería formalizarse en cinco minutos: foto, nombre y datos que el interesado desea que aparezcan.

Los que quieran, debajo o encima del nombre, pueden añadir un identificador fácil. Algunos ejemplos cómodos de memorizar:

—Juan de Palencia

—Tatiana, la ciudadana responsable

—El funcionario eficiente

—Ana Pérez de Burgos

—Rodríguez de Extremadura

Basta un programa de ordenador para descartar aquellos identificadores fáciles que se presten a confusión. Pero se aceptaría uno que fuera Rodríguez de Extremadura y otro que fuera Rodríguez orgulloso de ser de Extremadura.

Cualquier persona que quiera votar por ellos, en casa solo tiene que imprimir la papeleta, que tiene un código QR para contar después los votos el día de las elecciones. La papeleta también se puede imprimir en el colegio electoral.

Si un independiente logra el 1% de los votos en unas elecciones generales, tiene un asiento de los cien con que cuenta el congreso.

Si obtienes menos votos del 1%, puedes ir (no estás obligado) al ayuntamiento o a una comisaría de policía y hacer entrega de tus votos a quien desees, usando el identificador de esa misma base de datos.

Si alguien recibe votos suficientes para llegar al 1%, lograría un escaño en el congreso. Este sistema, sin duda, crearía un gran interés por las elecciones, lo reavivaría. El propósito es que en el parlamento haya un 25% de independientes, no creo que se supere esa cifra, porque los partidos seguirán contando con el poder de los aparatos de propaganda.

Pero dentro de los partidos, por este sistema explicado, se vota a las personas, no a las siglas de la agrupación política. El presidente actual podría tener un identificador como: Presidente Sánchez o Sánchez por el cambio. El presidente del partido de la oposición puede tener una identificador del tipo Nuñez Feijó, Partido Popular.

Esto permitiría saber quién es quién dentro de cada partido, porque se vería cuánta gente vota a cada uno.

Pienso que esta medida revitalizaría el interés por votar. Haría que las elecciones fueran más interesantes. Además, recuerdo que en mi sistema todas las sesiones del congreso son a puerta cerrada, sin medios de comunicación. Los parlamentarios estarían ahí para debatir, no para dar discursos propagandísticos.

Nota 1: El hecho de que cada papeleta tenga un código QR no ofrece posibilidades al fraude. La contabilidad se hará con máquina que lee el código, al mismo tiempo se escribe en el acta el nombre identificativo (real o el escogido por el interesado) y, por último, se guardan los votos; con lo que se pueden volver a contar.

Nota 2: Karina dice que no se debería permitir legalmente votar por terroristas. ¿Y por asesinos comunes sí? ¿Y por los violadores?


lunes, mayo 29, 2023

Una duda en mi constitución standard para todas las naciones

 

Dos parlamentos me parecen estéticamente los mejores: el británico, en estilo antiguo; el alemán, en estilo moderno. Con mención muy elogiosa del parlamento vasco.

♣ ♣ ♣

Los hechos de los últimos días, relativos a la venta de votos por correo, me han llevado a replantearme una parte de mi libro La decadencia de las columnas jónicas. En ese libro, explicaba yo que en las elecciones generales se puede votar por cualquier ciudadano español, ya que deja de haber candidatos oficiales: cualquier ciudadano puede votar a cualquier ciudadano español que sea mayor de edad.

Como solo el que obtiene el 1% de los votos pasa a ser congresista, los que obtienen menos de ese porcentaje pueden dar sus votos al que consideren más adecuado. Lo que se pretende con tal medida es que esa agrupación de votos, esa lenta decantación, logre que se acabe sumando un 1%.

♣ ♣ ♣

El problema —que ya me vino a la mente en su momento, pero que ahora observo con más preocupación— es que la idea es buena, pero ofrece demasiadas posibilidades de que alguien reciba contrapartidas (económicas o de otro tipo) a cambio de los votos.

Sé que muy pocos habrán leído ese apartado de mi libro, pero si alguno quiere ofrecer un consejo se lo agradecería; porque, de verdad, me encuentro ante una idea que, en abstracto, pienso que revitalizaría la democracia, pero que no deja de tener un notable peligro de corrupción.

♣ ♣ ♣

Antes de escucharos a vosotros –pues ya le he estado dando vueltas—, creo que las ventajas de la candidatura universal que propuse supera a los peligros.

Las ventajas de poder votar a cualquiera sin límite superan a los inconvenientes de un pequeño porcentaje de receptores de votos que los entreguen, por motivos espurios, a otros candidatos.

domingo, mayo 28, 2023

El Padrino: algunas consideraciones

 

Hace un par de minutos he acabado de ver, por tercera vez, El Padrino III. Dada la pasión que ha generado esta saga, os comparto mis pensamientos sobre ella.

Le escuché a Coppola contar como, cuando dirigía la filmación de la primera película de la saga, estaba en un cuartito del aseo, y escuchó que dos hombres de su equipo entraban en ese aseo y comentaba uno de ellos: Este tipo no tiene ni idea de dirigir.

Qué poco podía imaginar el que lo criticaba inmisericordemente que estaban filmando la que está considerada una de las cinco mejores películas de la historia. En este caso, la categoría de “película de culto” se queda corta.

Me sorprende cómo en las listas de las mejores cien películas de la historia, confeccionadas por individuos que buscan la excelencia del arte; que buscan, y lo logran, encontrar la excelencia del mejor arte; la I parte está considerada por muchos como la mejor obra. Este tipo no tiene ni idea de dirigir.

♣ ♣ ♣

Ahora bien, yo no soy tan entusiasta en mi juicio sobre la película. Pienso que sí que merece estar las mejores películas de toda la historia, pero yo no le otorgaría el calificativo de “obra maestra”.

No veo que esté a la altura de Amadeus, La Misión o el Séptimo Sello. ¿Por qué entonces desata tales pasiones? En mi opinión, siempre tendrá más admiradores Mozart que Bach. Siempre es más fácil escuchar un recitativo de zarzuela que la Danza de los Caballeros de Prokofiev. El Padrino no tiene las complejidades de Ciudadano Kane. Sí, La Gran Belleza es mucho más profunda que cualquier obra de Coppola.

♣ ♣ ♣

Lo que nunca he entendido es porqué a los entusiastas de la saga nunca les ha gustado la III parte. La coda de esta trilogía no plantea nuevos temas, la saga era imposible alargarla más. Ni a Puzzo ni al director se les ocurrían ya más variaciones sobre el mismo tema. La tremenda sensación de repetición planea tras el voto de confianza que le damos en los primeros tres cuartos de hora. Eso sí, la parte de la ópera con que culmina la saga es de una belleza coreográfica impresionante.

Pero las conversaciones entre Corleone y el cardenal Lamberto son extremadamente pobres y no logran crear la más leve suspensión de la incredulidad. Eso ocurre con algunas conversaciones más de esa tercera parte, y es cierto que no ocurría en las dos partes anteriores. Algunas conversaciones entre los banqueros, el arzobispo del Vaticano y Corleone son manifiestamente mejorables.

Esta vez he visto la versión del director. Me ha parecido un puro producto para vender algunos DVD más. 

No solo no cambia prácticamente nada; sino que, encima, el cambio de la última escena de la película no solo no la mejora sino que le sienta tan mal como a don Altobello los cannoli envenenados.

sábado, mayo 27, 2023

La belleza de un cuadro

 

Hoy, sábado, ha sido un día de romería, con un colegio del Opus Dei. ¡Qué buen ambiente entre las familias, entre los niños! De verdad que he salido edificado. Si esas familias fueran toda una nación, otra sociedad sería posible. ¡Cómo se derramaría la bendición sobre el país! ¡Cómo se irían resolviendo los problemas!

Por la tarde, he dado un pequeño paseo con un matrimonio colombiano que mañana toma un avión de regreso a su patria, y que hoy han venido a saludarme. Nos hemos comido una pizza y he regresado a mi casa a descansar de un largo día.

En ese momento, una señora ha venido a traerme tomates, berenjenas y huevos de un convento. Otro convento me ofreció habas y tengo todavía que pasar al torno para recoger su muestra de afecto.

viernes, mayo 26, 2023

La inteligencia artificial (3ª parte)

 

Ya he dicho que es imposible; pero si fuera posible, crear individuos plantearía muchos problemas morales para los creyentes: desconectar a un individuo racional artificial sería lo mismo que matar a alguien.

Estos seres no mueren, de manera que tendríamos unos cuantos seres inmortales a los que estaríamos obligados a no matar. Al principio, puede que haya pocos, pero si el soporte que mantiene esos programas se abaratara, podría haber millones de personas artificiales. Cada ser humano podría tener un compañero en su teléfono móvil o en el ordenador de su casa.

En una gran memoria, como las de las supercomputadoras podría haber miles de millones de personas artificiales. Aunque este problema moral no se planteará nunca en la realidad, solo es una cuestión moral teórica imposible: sin espíritu no hay persona.

♣ ♣ ♣

Si los seres humanos de nuestra época, ya ahora, están tan pegados a sus móviles y ordenadores, no quiero ni pensar hasta qué punto van a estar apegados algunos a falsas personas que aparentarán darles amistad o amor.

Me parece muy triste que, en el futuro, millones de personas (entre los 7 000 millones que habitamos ya la Tierra) se enamoren de una persona digital. Una persona que les parecerá única, que les ama a ellos, que les habla, que les anima, pero que, en realidad, solo es un gélido programa sin vida.

jueves, mayo 25, 2023

La inteligencia artificial (2ª parte)

 

Para un ateo sí que es más fácil creer que el hombre pueda, algún día, crear una verdadera inteligencia artificial, pero para nosotros los creyentes esa posibilidad está descartada. Si pudiéramos crear verdadera racionalidad, tendríamos allí una persona.

Nosotros los creyentes (cristianos, judíos, musulmanes, etc.) estamos seguros de que la racionalidad va unida al espíritu. Dado que solo Dios puede crear espíritus, el ser humano jamás podrá crear verdadera racionalidad.

Pero incluso desde un punto de vista meramente natural, hasta un ateo puede entender que un programa que se automodifica de acuerdo a las pautas otorgadas al principio, no va a ser verdaderamente racional.

Cuando uno ve a un campeón de ajedrez jugar con un ordenador, parece que la máquina realmente piensa. Pero no, no hay ni el más mínimo pensamiento en ello. Su “pensamiento” se reduce a algo parecido a una bola que discurre, hacia abajo, por el camino establecido en una red de caminos predeterminados. ¿Quién determina el camino establecido? Un programa ya escrito desde el principio hasta el final.

Sin duda, habrá hechos en el futuro que harán creer a muchos que la máquina piensa. La apariencia de pensamiento va a ser notable. Pero por más que converse con nosotros y hasta nos transmita sentimientos de alegría, de tristeza, de esperanza, no poseerá nada de eso. La imagen de un espejo parece viva, pero no lo está. En los programas de autoaprendizaje no hay una persona, habrá un programa preparado para aparentar que allí hay un individuo. De hecho, si no se le programa para parecer humano, los resultados de estos programas no ofrecen lugar a la duda de que no hay inteligencia.


miércoles, mayo 24, 2023

La inteligencia artificial (1ª parte)

 

No he dicho nada sobre la llamada “inteligencia artificial”, pero mi postura se ha mantenido inalterada desde el principio: es completamente imposible que la ciencia cree verdadera racionalidad. Los impresionantes programas producirán lo que tengan en su programación; incluso si esos programas pueden hacer cambios en la misma programación. Un ordenador nos puede sorprender por los datos que nos otorgue, pero nada saldrá fuera de lo que se metió. Y eso aunque el ordenador pueda aprender. Pero aprenderá según el programa que tenía desde el principio.

Por eso, no debería llamarse “inteligencia artificial”, sino “programas de autoaprendizaje”. Si fuera posible crear un programa que empezara tamquam tabula rasa, en blanco, eso sí que sería inteligencia, racionalidad, razón. Pero si todo lo que aprenda, todo lo que se automodifique, es agua que va a discurrir por los surcos dispuestos desde el principio, eso no es inteligencia. Aunque ofrece una notable impresión de poseer racionalidad. Parece que tiene inteligencia; y algo sí que tiene: los caminos inteligentes que dispuso su creador al principio en su programación. Esa inteligencia enlatada es la que permanece y da esa impresión.

Como los programadores disponen inteligentemente el modo en el que el programa aprenderá, cada vez parecerá que esos programas son más verdaderamente racionales.

martes, mayo 23, 2023

Me encanta un buen retrato

 

Hoy no os escribo nada. Solo os invito a que paseéis por las fotos y pinturas que reuní en este link, hace años:

http://elcanonigorampante.blogspot.com/

Buen paseo contemplativo.

lunes, mayo 22, 2023

Unas palabras más sobre un post anterior.

 

Hace unos días hablaba de los presos y la política. La lógica jurídica de la que hablé el otro día impone que alguien que está en prisión solo está obligado a residir en la prisión y a someterse al régimen de la prisión. Eso es todo. Por lo demás, sigue en posesión de todos sus derechos. Una vez que sale de la prisión vuelve a recuperar los pocos derechos que se vieron afectados por la sentencia de prisión.

Noruega es un perfecto ejemplo de lo que debería ser un sistema penal ideal. La reinserción del delincuente no debe llevarse a cabo bajo el criterio de la venganza. Los legisladores de casi todos los países (es decir, los políticos) siempre están muy inclinados a subirse a caballo de la opinión pública y hacer que las leyes se conviertan en expresión de esa demanda popular.

La ley como expresión de la razón (reinsertemos al que delinquió) o la ley como expresión de la voluntad popular (hagamos sufrir más al delincuente); la razón frente a la venganza.

Una segunda cosa quisiera decir respecto al tema tratado en post anteriores. No sabéis lo peligroso que es que los políticos comiencen a decidir quién se puede presentar como candidato y quién no. El congreso está compuesto por los representantes de los ciudadanos. El congreso no es un club de buenas costumbres ni una cofradía de la santa decencia. El indecente y el bocazas tienen pleno derecho a sentarse en el congreso.

Post Data: Si me dejara llevar de la voluntad popular, solo pondría fotos de cementerios.

domingo, mayo 21, 2023

Una mañana de descanso

 

Este domingo por la mañana, he dado un largo paseo con un amigo, por el centro de Madrid. La ciudad estaba radiante de belleza. Con la serenidad de un domingo: gente relajada, andando sin prisa, muchos carriles cerrados al tráfico para poder pasear por ellos. Pero sobre todo era la abundancia de árboles lo que más me sorprendió. La parte que va de Atocha a Cibeles aparece continuamente jalonada con árboles muy grandes, de más de medio siglo. Como había llovido, el verde los árboles era fresco y vívido. La lluvia cambia el color de las hojas de los árboles y de la hierba si se produce en primavera.

La otra cosa que me llamó la atención era la luz. Había muchas nubes y eso provocaba que la luminosidad del ambiente fuera suave. No tenía el brillo un poco agobiante del verano. Las calles aparecían bañadas en una luz serena.

Hemos almorzado en una terraza del Corte Inglés de Callao, desde la que se veía un mar de tejados del centro de Madrid y el bosque de la Casa de Campo.

Hemos vuelto a mi coche, sin prisas, aparcado en el Barrio de Salamanca. El final del paseo ha sido la opulencia, el lujo con clase del barrio más caro de Madrid. En la tranquilidad y reposo dominical, las calles de ese barrio parecen una versión utópica de lo que debería ser la ciudad de dentro de un siglo.

sábado, mayo 20, 2023

Hoy la cosa va de cementerios

Hace unas semanas, llegué a la conclusión de que a las almas bienaventuradas les gusta que sus cuerpos reposen en un lugar bonito, un lugar que permita la meditación acerca de la vida eterna y la resurrección. No estimo que ese asunto les sea indiferente. Antes creía que sí, pero un cementerio levantado con fe es como una predicación.

Voy a poner varias fotografías. Alguien me dirá que esas fotos son muy bonitas, pero que la necesidad de espacio sería excesiva. Hay una solución, que en la superficie los cementerios sean como los de las fotos; y que, al cabo de diez años, los restos (mucho menos voluminosos) sean enterrados en el terreno donde, posteriormente, se colocarán las losas y panteones. Las urnas pueden disponerse con muchos niveles hacia abajo. Sin nichos, completamente rodeadas y cubiertas de tierra. De esta manera, estos preciosos cementerios podrían contener tantos restos como los actuales. La otra solución es colocar esas urnas en grandes contenedores de urnas en forma de torres (cilindros bajos, no muy altos) o de cualquier otra forma que embellezca el cementerio. Allí las urnas llenarían completamente la “torre”, sin pasillos; buscando con ello que cupieran muchísimos en ese cilindro.

De esta manera, tendríamos la belleza de los cementerios de la foto y las ventajas de la economía de espacio. Sería muy recomendable que los camposantos fueran lugares habituales de oración, donde los cristianos fueran a pasear rezando el rosario por todos los difuntos.











viernes, mayo 19, 2023

Ya está aquí

 

Mi inestimable corrector argentino me ha enviado correcciones de mi novela titulado Libro IX. Al enmendar los textos, me encontré, con gran sorpresa, este párrafo escrito en las cercanías del año 2000:

En su casa, Abel no tenía ni un solo libro. No hacía falta. Si deseaba leer alguna página de alguna obra sólo tenía que tomar su mando a distancia y desde el menú de su pantalla buscar el título en cuestión en ese menú. No sólo libros, periódicos y revistas, cualquier cuadro, paisaje o grabado, podía verse con sólo mover el cursor por la pantalla e ir eligiendo posibilidades entre la variedad infinita de inacabables opciones. No había necesidad de ningún libro. Todas las bibliotecas del mundo estaban a la distancia de un simple golpe de cursor.

Tiene gracia porque, en el año en que eso escribí, aquello era ciencia-ficción; y ahora es nuestra realidad. Claro, he tenido que suprimir esas líneas.

Vagamente recuerdo que en Cyclus Apocalypticus mencionaba que el emperador escuchaba música que estaba online, en un servidor. Eso también era pura ciencia-ficción antes del año 2000, que fue cuando escribí la novela. Si encuentro ese pasaje, tendré que borrar la explicación.

El futuro ya está aquí, y lo llamamos “presente”. El futuro nos ha alcanzado, a los míos, a los cincuentones. La geopolítica que imaginamos hace 35 años no tiene nada que ver con la realidad actual. El ordenador en casa, impensable. Las televisiones inmensas, planas, no se me ocurrió; tampoco a los directores de cine. Eso sí, las lavadoras, externamente, no parecen haber evolucionado demasiado. Las cafeteras sí. Las casas de Estados Unidos tenían trituradora, no tengo ni idea para qué.

jueves, mayo 18, 2023

El Derecho Constitucional no tiene por qué ser popular

 

He leído los comentarios de ayer. Respeto la libertad de expresión incluso en los comentarios, siempre que lo hagáis de un modo respetuoso, sin ofender a nadie. Mi postura ya ha quedado expuesta y la de los comentaristas también. Voy a seguir adelante y a clarificar algo.

En el pasado ya expresé mi postura de que, desde un punto de vista estrictamente jurídico, existe un derecho a la autodeterminación, pero no un derecho a la secesión. Sobre eso no añadiré más, ya lo expuse con detalle y con muchos posts.

Ahora bien, si una constitución incluyera el derecho a la independencia de un territorio, yo lo acataría. Dígase lo mismo para el caso de España: si se va de la ley a la ley, yo lo acataría.

Una cosa es el ideal que marca el Derecho Constitucional, ideal que es opinable.

Y otra cosa es la realidad de la ley, que es imperativa.

Si de un modo legal, un territorio de España se independizara, yo lo acataría sin estar refunfuñando. Aceptaría la legalidad en paz y les desearía el mejor de los futuros, y visitaría ese Estado independiente sin disgusto.

Lo que no es posible en el Derecho Penal es el choque de trenes entre instituciones. Esa situación gravísima para la paz social debe ser resuelta a la mayor brevedad con la fuerza de la justicia. Si Cataluña fuera un Estado independiente y un territorio menor quisiera independizarse, les aconsejaría a las autoridades catalanas que actuaran con la contundencia de la ley.

En todo esto, no veáis en mí una mentalidad acomodaticia, no pensáis que lo hago por debilidad, por contemporizar. El Derecho debe ser expresión de la racionalidad, debe basarse en la lógica.

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El clero tiene que dar buen ejemplo de no inmiscuirse en la política; es decir, en las opciones lícitas, opinables, que deben ser dejadas en manos de los laicos. Ahora bien, hacer reflexiones teóricas sobre el Derecho Constitucional, cuando este tiene consecuencias tan directas en el campo de lo moral, sí que es adecuado para los pensadores cristianos: clérigos o no. La relación entre Derecho Constitucional y moral es evidente. Cuando los antidisturbios dispersan a golpes una manifestación, hay que tener claro si la justicia está de un lado o de otro: porque unos dan mamporros y otros los reciben.

Un cura no puede decir: “Hacen bien unos en golpear y los otros en recibir los golpes”.


miércoles, mayo 17, 2023

Pero qué ganas tiene la gente de que su voluntad se haga ley

 

Las cuestiones de derecho constitucional siempre han suscitado en mí un gran interés. Como muchos saben, 44 miembros de ETA pretenden presentarse a las elecciones locales en el País Vasco y Navarra. No pocos han pedido la ilegalización de Bildu o, al menos, que un miembro condenado de una banda terrorista no pueda presentarse a unas elecciones.

Disiento totalmente de semejante iniciativa de ilegalización. Si entramos por ese camino, la ley electoral se va a convertir en un tejido lleno de remiendos, añadidos y costuras. No se pueden presentar como candidatos los que pertenecieron a una banda terrorista, no se pueden presentar como candidatos los que apoyen el secesionismo, no se pueden presentar los que pegaron a su mujer, no se pueden presentar los que defraudaron a Hacienda.

No, no, la ley electoral no puede convertirse en un neumático plagado de parches. Todo ciudadano tiene derecho a ser representante de otros ciudadanos.

Aquí se ve la diferencia entre lo moral y lo legal. No todo lo legal es moral. Pero la ley no puede convertirse en una fotocopia de los libros de moral. Recuerdo las palabras de Tomás Moro en Un hombre para la eternidad, cuando le exigen todos que mande detener a Ricci, y pregunta que por qué:

–¡Porque es malo! –le dicen.

–Pues que lo detenga Dios –responde.

Lo que sí que genera un debate desde el III Reich es si un partido antidemocrático puede presentarse a las elecciones. Reconozco que es un tema opinable. En mi opinión, un poco dubitativa, es que sí. Otra cosa es que ese partido antidemocrático tendrá que cumplir con todos los requisitos de la constitución mientras esté en el poder.

Cumplir esos requisitos... En el fondo (el meollo de esos requisitos, su verdadero núcleo), se reduce a la independencia judicial, porque todos esos políticos que se quejan contra los partidos antidemocráticos no han querido articular una independencia del poder legislativo. Así que todo se reduce a eso en su esencia: independencia judicial (y con indultos). Sí, cierto que hay más requisitos, pero todos, al final, penden de la ley; y con mayoría suficiente en las dos cámaras puedes hacer la ley a tu gusto.

Después de años de darle vueltas, veo claro que los partidos antidemocráticos (islamistas, comunistas, de extrema derecha) deben contar con la posibilidad de presentarse a unas elecciones. De lo contrario será una coalición de partidos (con mayoría suficiente) quienes decidirán quién puede y quién no puede presentarse, y eso sí que es mucho más peligroso que permitir a Gadafi presentarse a unas elecciones.

Sí, los etarras tienen perfecto derecho, todo el derecho, a presentarse a las elecciones; y lo mismo los partidos independentistas.

Tiene derecho a presentarse como candidato el buen ciudadano y el malo, el borrachín y el virtuoso, el exconvicto y el anciano de 95 años, el ciego y el culturista.

Si alguien medioloco (o loco del todo) se quisiera presentar a las elecciones, nadie podría impedírselo. Si alguien quisiera ser candidato, anunciando que renunciará una hora después de lograr su escaño y tras intentar prenderle fuego a ese mismo escaño, yo defendería su derecho a ser candidato y a que la gente le votase.

La ley no es expresión de mi voluntad, sino que debe ser expresión de la razón. 

martes, mayo 16, 2023

La paciencia no es una virtud menor, sino mayor



 

En este blog no hablo nunca de nuestro presidente Sánchez. De otra manera, tendría que hablar todos los días. Pero no sería yo humano si no dijera alguna palabra acerca de sus últimas declaraciones. En las cuales, deliberadamente, ha dado a entender que fue el partido socialista el que derrotó a ETA.

Señor presidente, fue el Estado el que venció el terrorismo.

Fue una lucha épica. Para derrotarlo se hizo necesario un heroísmo que llegó a la sangre. Pero, al final, el Bien prevaleció.

Pero no es solo lo que ha dicho usted, señor presidente, es el tono. Sus palabras le definen. Al escucharle, ya no es necesario añadir nada acerca del valor moral de su persona. Uno le escucha y piensa: “Ya está dicho todo”.

lunes, mayo 15, 2023

Compensando

 

Os he fatigado tantas veces con posts tan largos, he abusado tanto de vuestras fuerzas, que el de hoy va ser muy cortito.

Una vez un franciscano me hizo reír a carcajadas cuando me dijo que le había comentado a un superior suyo: Mi humildad ha crecido a la sombra de tu soberbia.

Votaciones continuas: solventando problemas concretos

 

Acerca de las elecciones continuas, de las que hablé en días pasados, me he dado cuenta de un pequeño problema, que menos mal que admite solución.

Hay 48 semanas por año. Suponiendo que no se vote en los meses de vacaciones eso deja 40 semanas. Ese número por cuatro años da un total 160 semanas o ciento sesenta votaciones. (Nota añadida un día después: Me he equivocado multiplicando por 4 cada mes, hay meses de más semanas. Normalmente hay 52 semanas por año. No voy a cambiar los cálculos de este post, pero quede constancia del error).

Las votaciones continuas al congreso supondrían (cada cuatro años) un total de 160 semanas. Dejando fuera el domingo de Pascua (hay mucha gente que se va de vacaciones) y la semana de Navidad, por la misma razón, podría quedarse en 150 votaciones.

El problema en el que no había reparado es que una reducción tan drástica de votantes implica una reducción de votantes; y, por tanto, también de colegios electorales.

Si hay, por ejemplo, 10 veces menos de colegios electorales, eso significa que un votante tendrá el colegio electoral diez veces más lejos de su casa que ahora. Y eso sí que es un problema.

Ahora bien, no es exactamente así por las siguientes razones.

Primero: Se votaría solo por la mañana, la cantidad total de mesas electorales tendría que duplicarse. El problema, para empezar, se reduce a la mitad.

Segundo: Lo normal es que, en cada lugar de votaciones, normalmente escuelas e institutos, haya unas seis mesas electorales. Ahora solo habría una. Con lo cual el problema que antes se reducía a la mitad, ahora se divide por seis, que es el número más normal (creo) de mesas en cada lugar de votaciones.

Tercero: En aquellas poblaciones pequeñas con una sola mesa electoral, las votaciones sí que serían en una sola fecha para todos los habitantes. En aquellas localidades donde, por ejemplo, se constituyen cinco mesas, las votaciones serían cinco veces cada cuatro años. Si en una localidad se constituyen 30 mesas, habría treinta votaciones al cabo de cuatro años.

Conclusión: El problema inicial tras el considerando primero y el segundo, queda reducido a un 6%. El votante tendría que ir a un lugar seis veces más lejos que el lugar habitual hasta ahora.

Ahora bien, si descontamos todas las votaciones en localidades pequeñas que votan según el número de mesas electorales con las que cuentan hasta ahora, el resulta final, de nuevo, vuelve a reducirse. En España la población rural representa el 17% del total. De nuevo, el problema queda reducido al 4%. El votante tendría el colegio cuatro veces más lejos que hasta ahora.

También este problema admite adaptaciones que lo eviten. Pero, bueno, en una gran ciudad esto ya no sería un gran problema. Pero, insisto, se puede afrontar la cuestión para que la distribución de colegios sea como la de ahora. Una posible solución es multiplicar por cuatro los colegios y que cada uno solo abra hora y media. Otra posibilidad sería escoger a jubilados voluntarios para constituir colegios. Los más ancianos como los responsables de los colegios electorales.

No, no es problema insoluble que no se pueda solucionar.