Esta foto es del lavatorio
del Viernes Santo de este año en el convento del que soy capellán. Si comienzo
el post diciendo: un español, un francés
y un polaco fueron al lavatorio de Jueves Santo… parecería el comienzo de
un chiste. Pero eso fue exactamente lo que sucedió.
Hoy cuando retiremos el
Santísimo Sacramento del monumento, lo llevaré a una estancia dentro de la
clausura. Y allí, como en los años anteriores, cerraré con llave la puerta, las
religiosas moverán un baúl delante (simbolizando la piedra a la entrada del
sepulcro) y sellaré la puerta con un sello de “lacre”.
En realidad, no es lacre,
es otra materia. Pero el sello en relieve que mandé hacer (hace dos años) es
grande y bonito. Si puedo indicaré a alguien que haga fotos del sello. Ahora me
despido de vosotros, me voy a hacer otro rato de oración ante el monumento.