Estimados lectores del blog:
Aunque, en este blog, escribo acerca de las cosas más
informales de mi vida, de las facetas más superficiales, de los aspectos más
humanos, lo cierto es que detrás de lo humano está mi vida sacerdotal. Estoy completamente
convencido de que lo que realmente vale de mi vida como sacerdote es mi faceta sobrenatural.
Eso es lo que quedará después de mí.
Lo natural no deja de tener su propia causalidad. Pero
es mucho más limitada su estela de efectos. Tampoco digo que lo natural no sean
causas que tienen sus consecuencias. Pero lo que se hace en las almas tiene
efectos mucho más grandes.
¿Cuál es mi propósito? Llevar una vida más sobrenatural.
He decidido escribir en mi blog no cada día, sino de forma más esporádica.
De ningún modo penséis que es que estoy deprimido. Con
toda sinceridad, no lo estoy. La única medicina que tomo es Omeoprazol, para el
reflujo, y unos cuadraditos de chocolate de postre tras la comida, porque dicen
que retrasa el envejecimiento; solo tomo chocolate por sus cualidades
antioxidantes.
No, no se debe a ningún desánimo, ni a tristeza. Se debe
a razones espirituales.
La mejor cosa que he sacado de este blog ha sido la amistad en la lejanía con tantas personas. Os quiero a todos y, de verdad, que me
hubiera gustado encontrarme personalmente con cada uno de vosotros.
Post Data: Al acabar este post, me he sacado las gafas y me he hecho una foto (en blanco y negro) que es la que he puesto arriba.