sábado, mayo 23, 2020

Gazapitos que corretean por el texto






Pongo estos cuadros, por último día, como ejemplo de los buenos momentos que he pasado asomándome a las deliciosas obras del siglo XIX acerca de la época clásica.

Ayer tuve que cambiar, en mi novela, un pequeño detalle que no sé cómo se me pasó. No sé cómo tuve ese lapsus porque es un detalle del que hablado muchas veces con otras personas. En una escena del libro, Pablo, Lucas y el dueño de la casa leen en silencio en una mesa con buena iluminación de las ventas de la pieza.

No me di cuenta de que, en esa época, pocas personas eran capaces de leer en silencio; era algo rarísimo. San Agustín solo conoció a una persona que lo hacía. Se leía en voz baja. No había signos de puntuación. Ni siquiera signos para indicar que una frase acababa. Leer en voz alta ayudaba a saber cuándo acababa una frase por la entonación. Así que tuve que poner a Pablo en la entrada del salón cercano.

¿Cuántos centenares, como este, se me habrán pasado sin saberlo? Sin duda muchos centenares.

49 comentarios:

  1. Ay la memoria!
    Seguro habrá escrito lo que el E.S. quiere. Cuántas cosas no habrá evitado con nuestras debilidades!

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  2. Padre Fortea un saludo de Paz y bien, orare por usted para que DIOS lo ilumine y su Novela sea una verdadera obra de arte.

    UN ABRAZO DE HIJA A PADRE.

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  3. También en este mañana estaba por hay en su canal de youtube y encontré un pequeño vídeo suyo y me pareció lo mas de hermoso sin mentirle quede pensando en esas palabras el resto del día.

    gracias por su testimonio de vida.

    https://www.youtube.com/watch?v=cGdzM0rcxFw

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    1. Un hermoso testimonio de amor voacional

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    2. Que hermosura de testimonio. Se le ve en la cara que es feliz y está enamorado. Que Don del Cielo!
      Recibí su bendición y pedí una Gracia.
      Esta muy bien que nos bendiga. Algo de su Don nos llegará.
      Pater Vd. ha seguido a Cristo en la fidelidad de su Ministerio de tal forma que por visitar a los enfermos contrajo su enfermedad. Aleluya! por asemejarse a EL y poder reconocer sus obras en sus ungidos.

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    3. Si totalmente de acuerdo su felicidad en este video es uno de los detalles mas hermosos de una persona que se consagra por amor.

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    4. La verdad y la alegría no se pueden ocultar. Una mirada lo dice todo.

      Se puede amar con la mirada.

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    5. https://youtu.be/f1ZZTe9fIqE

      Del Cantar de los CANTARES

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    6. Gracias hermana por compartir ese video del padre Fortea tan hermoso, casi me hace llorar de la emoción, por el hecho de el amarle tanto a Nuestro Señor yo lo amor tambien no hace mas si no inspirarme amor puro, Dios lo bendiga siempre, sus palabras padre fortea son como las de un angel.

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  4. No sufras por esos detalles. Lo dijo Dalí: "Los errores son casi siempre de naturaleza sagrada. Nunca traten de corregirlos - Por el contrario: racionalícenlos, entiéndalos completamente - Después de eso, les será posible sublimarlos." Y yo añado,la perfección no existe y el perseguirla con tanto ahínco sólo desprestigiará tu obra y tu legado.

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  5. Posiblemente haya más arte en una lata de Coca-Cola o en un Mig derribado sobre la península de Corea, que en esa novela tuya. Pero no quiero pecar de pesimista y precipitarme en el juicio temerario, ya que aún no he tenido ocasión de leerla.

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  6. Bueno, sois bondadosas. Trabajo, os aseguro que trabajo.

    Como la novela sobre Moisés no está publicada digitalmente, para haceros una idea de la novela sobre san Pablo podéis leer "Obispo reinante". EStá escrita en el mismo género literario. Y esa si que está gratis en Biblioteca Forteniana.

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    1. Tengo que ir a mirar con más detenimiento la "Biblioteca Forteniana", seguro que hay verdaderas perlas escondidas. Gracias.

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    2. Estimado Padre José Antonio Fortea Cucurrull, espero que se encuentre mejor de salud.

      Gracias por transmitirnos el amor a Cristo Jesús, a través de San Pablo.

      “Así que tuve que poner a Pablo en la entrada del salón cercano”.

      Hablando de la Novela de San Pablo, en su obra literaria sobre la “Historia del Mundo angélico”, me ha hecho sugerir que, quizá para San Pablo, leer en silencio, es como escuchar a Cristo, en el corazón sin puntos, ni comas. Así como, Dios enseñó a los ángeles a través del pensamiento. Quizá por eso pocas personas, podrían leer en silencio. Sin embargo, cuando San Pablo, predica la palabra se vuelve acción. Esto me lleva a reflexionar que Dios les enseñaba a los ángeles través del pensamiento, porque toda palabra pronunciada por Dios es acción: "El Verbo se hizo Carne y habitó entre nosotros".

      EL silencio es tan necesario para abrir el oído a la palabra de Dios, contemplarla, vivirla y guardarla en el corazón como la hacía la Virgen María, Nuestra Madre y Modelo de Fe.

      En conclusión, me agrada la propuesta de que San Pablo y San Lucas leyesen en silencio.

      Nota: Me gustaría que nos dijera, ¿qué hace San Pablo en la entrada del salón cercano?

      Muchísimas gracias por todo su legado Padre José Antonio Fortea C.

      Es un privilegio leerles a todos.

      Saludos a todos desde Cozumel, Quintana Roo México, nuestra hermosa isla.

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  7. Añadiré una cosa más, mi comprensión acerca de san Pablo, acerca de la Iglesia en la primera generación se ha multiplicado por 1000, sin exagerar, durante la escritura de esta novela que ya lleva años con interrupciones.

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    1. Cuánto más se conozca una vida, una biografía como la de San Pablo y su entorno, más se ama su mensaje

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    2. Pensé que había que amar a Jesús, sus enseñanzas y su mensaje de salvación.

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    3. Yo me imagino a San Pablo con una mirada como muy penetrante, casi acerada, pero muy alegre al mismo tiempo.

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    6. Jesús fue el mercader de la fe. Un día los apóstoles dijeron a Jesús: “Señor, auméntanos la fe” (Lc 17, 5). Querían saber algo del efluvio embrujado que salía por los cinco sentidos de aquel hombre singular. Él les habló con naturalidad de la magia secreta que lo envolvía. “Vivo en intimidad con el Padre, él y yo somos uno. Yo no hago nada que no vea hacer al Padre. Quien me ve a mí, ve al Padre”.

      La fe es por eso la fuerza que en silencio, sin hacer ruido, cambia el mundo y lo transforma en el reino de Dios, y la oración es expresión de la fe Dios no puede cambiar las cosas sin nuestra conversión, y nuestra verdadera conversión comienza con el grito del alma, que implora perdón y salvación.

      A cada uno y cada una toca responder al silencio suave de Dios con un silencio atento, un silencio que escucha. Escribía san Ignacio de Antioquía que «quien ha comprendido las palabras del Señor, comprende su silencio, porque al Señor se le conoce en su silencio». El silencio de Dios es a menudo para el hombre el lugar, la posibilidad y la premisa para escuchar a Dios, en vez de escucharse solo a sí mismo. Sin la voz silenciosa de Dios en la oración, el yo humano acaba por encerrarse en sí mismo, y la conciencia, que debería ser eco de la voz de Dios, corre el peligro de reducirse a un espejo del yo, de forma que el coloquio interior se transforma en un monólogo, dando pie a mil autojustificaciones.

      El silencio es capaz de abrir un espacio interior en lo más íntimo de nosotros mismos, para hacer que allí habite Dios, para que su Palabra permanezca en nosotros, para que el amor a Él arraigue en nuestra mente y en nuestro corazón, y anime nuestra vida. Con la búsqueda, con la oración confiada ante las dificultades, el hombre se libera de su autosuficiencia; pone en movimiento sus recursos interiores; ve cómo se fortalecen las relaciones de comunión con los demás. El silencio de Dios, el hecho de que no intervenga siempre de un modo inmediato para resolver las cosas del modo en que querríamos, despierta el dinamismo de la libertad humana; llama al hombre a hacerse cargo de su propia vida o de la de los demás, y de sus necesidades concretas.

      Feliz el que guarda la fe pura en su seno; no le dolerá ningún sacrificio.

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    7. Y la evangelización?

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    8. La excelencia del silencio es otro tema.

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    10. No es el mensaje el que debe amarse ni siquiera el interlocutor sino a Jesús porque Él es el Verbo hecho carne. El centro de la evangelización siempre es Jesús. Por eso es Cristocéntrica.

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    11. Karina

      Totalmente de acuerdo.

      Jesús mismo, Evangelio de Dios, ha sido el primero y el más grande evangelizador.

      Para Jesús la evangelización asume la finalidad de atraer los hombres dentro de su vínculo íntimo con el Padre y el Espíritu. Éste es el sentido último de su predicación y de sus milagros: el anuncio de una salvación que, aunque se manifieste a través de acciones concretas de curación, no puede ser hecha coincidir con una voluntad de transformación social o cultural, sino con la experiencia profunda concedida a cada hombre de sentirse amado por Dios y de aprender a reconocerlo en el rostro de un Padre amoroso y pleno de compasión (cf. Lc 15).

      La evangelización de Jesús conduce naturalmente al hombre a una experiencia de conversión: cada hombre es invitado a convertirse y a creer en el amor misericordioso de Dios hacia él. El reino crecerá en la medida en que cada hombre aprenderá a dirigirse a Dios en la intimidad de la oración como a un Padre (cf. Lc 11,2; Mt 23,9) y, siguiendo el ejemplo de Jesucristo, aprenderá a reconocer en plena libertad que el bien de su vida es el complimiento de la voluntad divina (cf. Mt 7,21). Evangelización, llamada a la santidad y conversión.

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    12. La contemplación es mirada de fe, fijada en Jesús. "Yo lo miro y él me mira", decía, el santo cura de Ars que oraba ante el Sagrario. Esta atención a Él es renuncia a “mí”. Su mirada purifica el corazón. La luz de la mirada de Jesús ilumina los ojos de nuestro corazón; nos enseña a ver todo a la luz de su verdad y de su compasión por todos los hombres. La contemplación dirige también su mirada a los misterios de la vida de Cristo. Aprende así el "conocimiento interno del Señor" para más amarlo y seguirlo (Cf San Ignacio de Loyola, Ejercicios Espirituales 104). La contemplación es escucha de la palabra de Dios. Lejos de ser pasiva, esta escucha es la obediencia de la fe, acogida incondicional de siervo y adhesión amorosa del hijo. Participa en el “sí” del Hijo hecho siervo y en el "fiat" de su humilde esclava.

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    13. Estimado Padre José Antonio Fortea Cucurrull, espero que se encuentre mejor de salud.

      Gracias por transmitirnos el amor a Cristo Jesús, a través de San Pablo.

      “Así que tuve que poner a Pablo en la entrada del salón cercano”.

      Hablando de la Novela de San Pablo, en su obra literaria sobre la “Historia del Mundo angélico”, me ha hecho sugerir que, quizá para San Pablo, leer en silencio, es como escuchar a Cristo, en el corazón sin puntos, ni comas. Así como, Dios enseñó a los ángeles a través del pensamiento. Quizá por eso pocas personas, podrían leer en silencio. Sin embargo, cuando San Pablo, predica la palabra se vuelve acción. Esto me lleva a reflexionar que Dios les enseñaba a los ángeles través del pensamiento, porque toda palabra pronunciada por Dios es acción: "El Verbo se hizo Carne y habitó entre nosotros".

      EL silencio es tan necesario para abrir el oído a la palabra de Dios, contemplarla, vivirla y guardarla en el corazón como la hacía la Virgen María, Nuestra Madre y Modelo de Fe.

      En conclusión, me agrada la propuesta de que San Pablo y San Lucas leyesen en silencio.

      Nota: Me gustaría que nos dijera, ¿qué hace San Pablo en la entrada del salón cercano?

      Muchísimas gracias por todo su legado Padre José Antonio Fortea C.

      Es un privilegio leerles a todos.

      Saludos a todos desde Cozumel, Quintana Roo México, nuestra hermosa isla.

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    16. Dios quiera comprendamos más también nosotros. Con una lectura segura. Gracias padre.

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  8. Qué maravilla esos patios con el estanque y la fuente... " Hacia aguas de remanso me conduces ".

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  9. Muere "Saturno", el cocodrilo de Adolf Hitler. Después de sobrevivir a los durísimos bombardeos de la RAF, se le vió abandonar el Zoo de Berlin entre las llamas avanzando desorientado entre cadáveres de miembros de las SS. Estuvo oculto por tres años, y nadie se explica cómo pudo sobrevivir; al cabo de este tiempo fue hallado por fuerzas británicas que lo entregaron, como un presente de concordia, a soldados de la zona soviética. (Para ver los detalles de este extraño caso, ver en el diario "El Mundo", el artículo:

    https://www.elmundo.es/ciencia-y-salud/ciencia/2020/05/23/5ec9759221efa0f26a8b4638.html

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  10. Muy actual para nuestro tiempos que decae , víctima del hedonismo. No tenía ese dato tan valioso, su lectura en voz alta, de razón la oratoria. Gran detalle. Me gustaría saber si es esos siglos la Mujer leía. Gracias Padre José Antonio Fortea Cucurull por ese viaje tan detallado. Una rica composición.

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  11. PADRE. Esa es la iluminación del ESPÍRITU SANTO, que ha visto todo el esfuerzo que ha hecho para terminar su novela, aún estando enfermo. DIOS LE SIGA ACOMPAÑANDO. 🙏❤️

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  12. Es curioso eso de que en la antigüedad practicamente siempre se leía en voz alta. Me recuerda a lo de que Elí pensó que Ana estaba borracha porque rezaba sin que se oyera su voz:

    «Como Ana prolongase su oración ante Yahveh, Elí observaba sus labios.
    Ana oraba para sí; se movían sus labios, pero no se oía su voz, y Elí creyó que estaba ebria»


    (I Samuel 1,12-13).

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    1. También a mí me parece curioso ese detalle de la lectura. Debían de saber entonar muy bien al leer porque no tenían ni puntos ni comas

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    2. Nadya, interesante la pregunta que haces sobre si la mujer también era lectora. Creo que no, que en aquella época sólo se permitía a los patriarcas de la comunidad, pero el PFortea nos lo puede aclarar

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    3. Es curioso también que el chino hasta hace pocas décadas (!!) tampoco se escribía con signos de puntuación.

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  13. El libro que más me ha gustado de toda la biblioteca forteniana: La Tempestad de Dios, Memorias de un anciano dictador.
    Me quito el sombrero, le admiro padre.
    Me recuerda mi infancia con mis abuelos explicándome aquellos terribles años de sangre y fuego, de mártires, héroes, batallas, terror, brutalidad, hambre, etc.
    Y no era película, era real, en Cataluña muchos de los que no pensaban en rojo, comenzando por los curas, fueron asesinados por los demócratas defensores de la libertad, eso es cierto, me lo contaron mis abuelos, supervivientes de aquella bestialidad socialista-comunista.

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  14. Buenos días... ¡FELIZ SOLEMNIDAD DE LA ASCENSIÓN DEL SEÑOR!

    Va vídeo de Donald Trump (2 minutos, con subtítulos en español):

    https://www.youtube.com/watch?v=8pJGGRoiHlA

    ¡Que Dios le bendiga por esto!

    Oremos mucho por nuestros gobernantes.

    Abrazos y besos a tod@s,


    A.-

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    1. Gloria a Dios. Oremos por Trump y por todos los gobernantes. Feliz día de la Ascensión! 🙌🙏🏽

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  15. El buen Pastor ha subido

    https://youtu.be/faKcO9MA3HM

    Un día estupendo.

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  16. Ascensión del Señor, solemnidad
    Hch 1,1-11: Lo vieron levantarse.

    En mi primer libro, querido Teófilo, escribí de todo lo que Jesús fue haciendo y enseñando hasta el día en que dio instrucciones a los apóstoles, que había escogido, movido por el Espíritu Santo, y ascendió al cielo. Se les presentó después de su pasión, dándoles numerosas pruebas de que estaba vivo, y, apareciéndoseles durante cuarenta días, les habló del reino de Dios. Una vez que comían juntos, les recomendó:

    - «No os alejéis de Jerusalén; aguardad que se cumpla la promesa de mi Padre, de la que yo os he hablado. Juan bautizó con agua, dentro de pocos días vosotros seréis bautizados con Espíritu Santo.»

    Ellos lo rodearon preguntándole:

    - «Señor, ¿es ahora cuando vas a restaurar el reino de Israel?» Jesús contestó:

    - «No os toca a vosotros conocer los tiempos y las fechas que el Padre ha establecido con su autoridad. Cuando el Espíritu Santo descienda sobre vosotros, recibiréis fuerza para ser mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta los confines del mundo.»

    Dicho esto, lo vieron levantarse, hasta que una nube se lo quitó de la vista. Mientras miraban fijos al cielo, viéndolo irse, se les presentaron dos hombres vestidos de blanco, que les dijeron:

    - «Galileos, ¿qué hacéis ahí plantados mirando al cielo? El mismo Jesús que os ha dejado para subir al cielo volverá como le habéis visto marcharse.»

    Sal 46,2-3.6-7.8-9 : Dios asciende entre aclamaciones; el Señor, al son de trompetas.

    Pueblos todos batid palmas,
    aclamad a Dios con gritos de júbilo;
    porque el Señor es sublime y terrible,
    emperador de toda la tierra.

    Dios asciende entre aclamaciones,
    el Señor, al son de trompetas;
    tocad para Dios, tocad,
    tocad para nuestro Rey, tocad.

    Porque Dios es el rey del mundo;
    tocad con maestría.
    Dios reina sobre las naciones,
    Dios se sienta en su trono sagrado.

    Ef 1,17-23: Lo sentó a su derecha, en el cielo.

    Hermanos: Que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, os dé espíritu de sabiduría y revelación para conocerlo. Ilumine los ojos de vuestro corazón, para que comprendáis cuál es la esperanza a la que os llama, cuál la riqueza de gloria que da en herencia a los santos, y cuál la extraordinaria grandeza de su poder para nosotros, los que creemos, según la eficacia de su fuerza poderosa, que desplegó en Cristo, resucitándolo de entre los muertos y sentándolo a su derecha en el cielo, por encima de todo principado, potestad, fuerza y dominación, y por encima de todo nombre conocido, no sólo en este mundo, sino en el futuro. Y todo lo puso bajo sus pies, y lo dio a la Iglesia como cabeza, sobre todo. Ella es su cuerpo, plenitud del que lo acaba todo en todos.

    Mt 28,16-20: Se me ha dado pleno poder en el cielo y en la tierra.

    En aquel tiempo, los once discípulos se fueron a Galilea, al monte que Jesús les había indicado. Al verlo, ellos se postraron, pero algunos vacilaban. Acercándose a ellos, Jesús les dijo:

    -«Se me ha dado pleno poder en el cielo y en la tierra. Id y haced discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo; y enseñándoles a guardar todo lo que os he mandado. Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.»

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    1. Comentario

      Como broche final a su evangelio, san Mateo incluye el “mandato misionero” con el que Jesús envía a los discípulos a evangelizar y bautizar a todas las gentes, porque todos pueden ya beneficiarse de los frutos de la redención. Y en su última aparición, el Señor, “a la vista de ellos, fue elevado al cielo, hasta que una nube se lo quitó de sus ojos” (Hch 1,9), como narra la primera lectura en la liturgia de la solemnidad de hoy.

      El mandato misionero del resucitado no va dirigido solo a los primeros discípulos, sino que es tarea y misión para todos: “A nosotros, los cristianos, nos corresponde anunciar en estos días, a ese mundo del que somos y en el que vivimos, el mensaje antiguo y nuevo del Evangelio”[1], recordaba san Josemaría.

      Y decía también que la mayoría de los cristianos debemos “llevar a Cristo a todos los ámbitos donde se desarrollan las tareas humanas: a la fábrica, al laboratorio, al trabajo de la tierra, al taller del artesano, a las calles de las grandes ciudades ylos senderos de montaña”[2]. San Josemaría invitaba por eso a sentir el mandato misionero en primera persona: “Id, predicad el Evangelio… Yo estaré con vosotros…” —Esto ha dicho Jesús… y te lo ha dicho a ti”[3].

      La fiesta de la Ascensión es una buena ocasión para renovar nuestro afán apostólico y el deseo de llevar almas al cielo, donde Jesús glorioso nos espera y que aprendemos de los primeros discípulos. Ellos se enfrentaban a la difícil tarea de cristianizar el mundo entero, plagado de civilizaciones que aún no conocían el evangelio y de ideologías y obstáculos de todo tipo. Pero lejos de desalentarse, los apóstoles estaban llenos de confianza en Jesús resucitado y victorioso, quien les dijo claramente: “se me ha dado toda potestad en el cielo y la tierra” (v. 18), “y sabed que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo” (v. 20).

      Como decía el Papa Francisco, “la Ascensión nos recuerda esta asistencia de Jesús y de su Espíritu que da confianza, da seguridad a nuestro testimonio cristiano en el mundo. Nos desvela por qué existe la Iglesia: la Iglesia existe para anunciar el Evangelio. ¡Solo para eso! Y también, la alegría de la Iglesia es anunciar el Evangelio. La Iglesia somos todos nosotros bautizados. Hoy somos invitados a comprender mejor que Dios nos ha dado la gran dignidad y la responsabilidad de anunciarlo al mundo, de hacerlo accesible a la humanidad. Esta es nuestra dignidad, este es el honor más grande para cada uno de nosotros, ¡de todos los bautizados!”[4].

      Por otro lado, nos dice el evangelio que cuando el Resucitado se mostró a los discípulos, “en cuanto le vieron, lo adoraron” (v. 17). Esta actitud reverencial ante el Señor será también nuestra fuerza en la tarea de la evangelización. Dice santo Tomás de Aquino que “lo que admiran mucho los hombres lo divulgan luego, porque de la abundancia del corazón habla la boca (Mt 12,34)”[5]. Si sabemos adorar al Señor con devoción y agradecimiento, si le damos al Resucitado el homenaje que merece, nuestro testimonio ante los hombres será más auténtico y eficaz, porque brotará de un corazón lleno de Dios, como el de los primeros discípulos y las santas mujeres.

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    2. Opus Dei

      (Adoracion y Evangelización se complementan)

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  17. Que interesante detalle! para nada descartable aún en nuestros días, es muy bueno leer en voz alta, nos damos cuenta de muchas cosas, pasa como bien.

    Como dice Maris, "aprendemos".

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