jueves, febrero 18, 2021

Puzles teológicos ampliados durante dos milenios

 

Un lector de Estados Unidos me ha enviado unas profundísimas reflexiones. Le he estado dando vueltas a sus aportaciones. Es cierto que el por Cristo de la doxología puede tiene una razón más profunda que la de la Redención, que fue la primera que pensé, la que tenía en mente cuando escribí el primer post.

Es verdad que hay una relación ontológica intratrinitaria entre el Padre y el Hijo que tiene que reflejarse en la revelación del Misterio de los misterios.

Es cierto también que, sin Encarnación, podría haber perdón si así Dios lo determinaba, pero hubiera sido más difícil la divinización, la santificación llevada a las más altas cumbres.

También resulta fascinante, como me señalaba él, que Dios es libre, pero Dios siempre hace lo que más conviene porque es Perfecto. En ese sentido, la Voluntad Divina se mueve por unos cauces de necesidad, en cuanto que no va a realizar lo imperfecto, pudiendo hacer lo perfecto. Dios no tiene voluntad, Dios es Voluntad.