Siguiendo el último post. (Aclaremos primero que la foto no es de un parlamento, sino de una iglesia.) El ideal de la democracia
pienso que pasa por dar un paso más allá de la usual división de los Tres
Poderes, separando el Poder Ejecutivo del Poder de los representantes del
Pueblo.
Por supuesto que el Ejecutivo debe seguir siendo
elegido por la mayoría de votos del Parlamento, pero habría que convencer a los
políticos de que su misión es representar, elegir, no poner ellos mismos las
manos sobre la tarta del Poder Ejecutivo.
El Parlamento, todos los partidos, deben tener la
misión de aconsejar al Gobierno, de darle indicaciones, pueden reprenderle, sugerirle
medidas, pueden pedir el cese de un ministro; y, por supuesto, pueden someter a
votación el cese del presidente del Gobierno.
Si lográramos esta “división de poderes” entre
representación del Pueblo y Poder Ejecutivo, se podría elegir al presidente del
modo más unánime posible por parte del parlamento.
Una división de este tipo no evita que la lucha
política continúe, pero lo haría de un modo más saneado. Ahora mismo la lucha
política consiste en que si mi partido apoya al tuyo, todo lo que haga tu
presidente está bien. Si mi partido no te apoya, todo lo que haga tu presidente
está mal.
Lo ideal sería, ¡en una situación ideal!, que la
confrontación política continuase, pero bajo un presidente que siguiera gozando
de la confianza de los representantes del Pueblo durante largos mandatos. El
voto secreto será imprescindible para que por un lado estén los discursos y por
otro derrotero discurran las votaciones. Porque los mismos congresistas de un
partido podrían entender que alguien es un buen presidente, diga lo que diga el
líder del propio partido.
Ya sé que lo que propongo está muy lejos de poderse
hacer. Pero entiendo que sería lo mejor para todos: un gobierno no partidista,
de todos, y que no tenga que preocuparse tanto de la cambiante y caprichosa
opinión pública.
Soy consciente de que lo que propongo hoy día es imposible.
Sé que los representantes del Pueblo siempre querrán ser ellos mismos los que
también gobiernen. Sé que hay una cierta lógica en que los representantes del
Pueblo sean los que gobiernen.
Pero no hay ninguna duda de que el sistema actual tiene
vicios y que esta propuesta (si se lograra) sería el modo de salir de la actual
situación contaminada por el egoísmo. ¿Pero cómo llegar a una visión altruista
de la política? ¿Cómo llegar a una situación en que las decisiones de gobierno
se tomaran con una visión no partidista? Incluso si se lograra implantar este acuerdo,
la naturaleza humana ejercería una tendencia hacia la búsqueda del propio bien
particular (el de cada partido) frente al bien común. Incluso logrando esto, el
acuerdo altruista sería muy inestable.