Un alma caritativa se ha apiadado de mí y me ha pasado
la clave de Netflix para ver Los dos papas. Llevo vista media hora.
Fotografía clara, buena interpretación, la historia discurre con agilidad, se
nota que se ha puesto dinero en la ambientación. Pero los diálogos son falsos
diálogos de cardenales. Esto es tan poco verdadero como aquel Diario de un
cura rural de Bernanós. Dicho de otro modo, se tiene ya el discurso de lo
que se quiere decir (Iglesia moderna, Iglesia inmovilista) y los personajes son
meros vehículos de esos discursos. Esa receta nunca es buena para una gran
novela.
El camino para una buena novela es justo el contrario:
partir de una persona real, tangible, concreta. Aunque sea una obra de ficción.
La buena novela se adentra en una historia concreta, con todos sus matices, con
su psicología.
Alguien me dirá que se reflejan bien las psicologías
de Benedicto y de Francisco. Bueno, compárese el resultado con personajes como Pulp
Fiction o Jackie Brown, por no poner ejemplos eclesiásticos como La
misión o Becket. En Los dos papas todo el armazón de los
personajes no deja de tener algo de decorado. El olor a pintura nueva resulta
imposible de sentirlo. El Julio II de El tormento y el éxtasis es
auténtico, veraz. El guion de esa película de 1965 es una patata frita, una
total pérdida de tiempo, pero el personaje de Julio II es formidable. El personaje
de Miguel Ángel, a su lado, otro desastre.
Muy querido Padre Fortea, no pretendo contradecir su opinión sobre la película, sino aportar una visión diferente con la que coincido plenamente. En este caso es la visión de un teólogo por el que seguro que no siente ninguna simpatía y del que yo no he leído ningún libro. Aunque habrá quienes lo interpreten mal, lo hago con todo el respeto y cariño hacia usted. Aprovecho para sugerirle que publique sus libros en formato EPUB para los que leemos en libro electrónico. Tendrían mucha más difusión. Un abrazo afectuoso.
ResponderEliminarLos dos papas: Francisco y Benedicto XVI
Título original del artículo: «Dos papas que representan dos concepciones diferentes de la iglesia»
Leonardo Boff
27/01/2020
No hace mucho se estrenó la película "Los dos papas", del consagrado cineasta brasileiro Fernando Meirelles. En ella se plasman las trayectorias de los dos últimos papas de la iglesia católica: Benedicto XVI (Ratzinger) y el actual Papa Francisco (Bergoglio). Ambos han marcado el rumbo de los católicos de todo el mundo en las últimas décadas y representan dos concepciones muy diferentes de vivir la institución que representan.
Leonardo Boff, reconocido teólogo, representante de la Teología de la Liberación en América Latina, comisionado de la Carta de la Tierra y reconocido defensor de los derechos humanos y de la ecología planetaria hace una interesante reflexión sobre ambos personajes a los que conoció de manera directa.
Leonardo reconoce que la película se ha basado en hechos históricos que recogen las ideologías de ambos papas a través de sus manifestaciones públicas. Vierte su opinión personal basada en el conocimiento que tiene de ambos y de las relaciones que mantuvo y mantiene desde hace años con ambos.
El Cardenal Joseph Ratzinger condenó a más de 110 teólogos y teólogas de todo el mundo para preservar la ortodoxia, fueron depuestos de sus cátedras y silenciados, castigados o expulsados como representantes de la iglesia católica. Entre ellos estaba Leonardo Boff.
La visión objetiva que aporta sobre ambos personajes arroja luz y nos permite reconciliar los opuestos que tantas veces se manifiestan en nuestra vida. He aquí su aportación:
Papa Ratzinger: finísimo y riguroso
EliminarCon el profesor Joseph Ratzinger tengo una deuda de gratitud por haber valorado positivamente mi tesis doctoral sobre "La Iglesia como Sacramento Fundamental en el Mundo secularizado", voluminosa, más de 500 páginas impresas. Me ayudó financieramente con una cantidad considerable de marcos y encontró una editorial para su publicación, cuando nadie quería arriesgarse a publicar un libro de estas dimensiones. La recepción en la comunidad teológica internacional fue excelente, considerada una obra fundamental, especialmente por el reconocido especialista en el tema Iglesia Jean Yves Congar, dominico francés.
El profesor Ratzinger es una persona de trato finísimo, extremadamente inteligente; nunca lo he visto levantar la voz; es muy tímido y reservado.
Al saber que había sido elegido Papa, inmediatamente pensé: "Es un Papa que sufrirá mucho porque quizás no haya abrazado nunca a la gente, mucho menos a una mujer, ni haya estado expuesto a las multitudes".
Nuestra amistad se fortaleció porque durante cinco años, a partir de 1974, en la semana de Pentecostés (que suele caer hacia mayo) alrededor de 25 reconocidos teólogos y teólogas progresistas de todo el mundo nos reuníamos en la ciudad de Nimega en los Países Bajos o en otra ciudad europea. Durante una semana discutíamos ecuménicamente, acompañados por un pequeño grupo de científicos, hasta del pedagogo y educador Paulo Freire, sobre temas relevantes del mundo y de la Iglesia. Editábamos una revista, «Concilium», que se publicaba en 7 idiomas y aún se sigue publicando (en Brasil por la Editora Vozes). En ella, las mejores mentes del mundo colaboraron en las diferentes áreas del conocimiento, desde la sexualidad y la Teología de la Liberación hasta la moderna cosmología.
El Prof. Ratzinger se sentaba casi siempre a mi lado. Después del almuerzo, mientras casi todos echaban una siesta, él y yo paseábamos por el jardín, discutiendo temas de teología, nuestros favoritos San Agustín y San Buenaventura, de los cuales he leído prácticamente toda su obra.
Cada uno en su papel sin perder la relación
EliminarHecho cardenal y presidente de la Congregación para la Doctrina de la Fe, tuvo la ingrata misión de interrogarme sobre el libro "Iglesia: Carisma y poder" en 1984. Cumplió institucionalmente su papel de interrogador y yo el de defensor de mis opiniones. Fue un diálogo firme pero siempre elegante por su parte, incluso cuando, después del interrogatorio, tuvimos una segunda parte, es decir, un encuentro aún más difícil con él y con los Cardenales brasileños Don Paulo Evaristo Arns y Don Aloysio Lorscheider que me acompañaron en Roma y testificaron a mi favor. Éramos tres contra uno. Debo admitir que él se sentía incómodo.
Después de un año, recibí la resolución del proceso doctrinal con la deposición de la cátedra de teología, de mis tareas en la Editorial Vozes y la imposición de un "silencio obsequioso" que me impedía hablar, enseñar, entrevistar y publicar cualquier cosa. La decisión final después del interrogatorio fue tomada por 13 cardenales (13 para romper el empate). Más tarde me enteré por un emisario de su secretario privado que él, el Cardenal Ratzinger, votó a mi favor, pero fue un voto perdedor. Hay que decir que cada vez que los periodistas le preguntaban sobre mí, él respondía con humor que soy "ein frommer Theologe" (un teólogo piadoso) que algún día profundizará su verdadero camino teológico.
La película no retrata la figura fina y elegante que lo caracteriza. En una escena levanta la voz y casi grita, lo que me parece totalmente improbable y contrario a su carácter. [En esto estoy totalmente de acuerdo con el autor. Es la escena peor lograda de la película. J.J.A.]
A pesar de estar ahora en diferentes situaciones, él Papa y yo, un teólogo promovido a laico, nunca perdimos nuestra amistad. En sus noventa años, cuando se organizó un Festschrift (un libro de homenaje), en el que escribieron muchas personas notables, a petición suya me pidieron que escribiera mi testimonio sobre él, lo cual hice con agrado. La amistad es más fuerte que cualquier doctrina, siempre humana.
El Papa Francisco: tierno, fraterno e innovador
EliminarCon referencia a Jorge Mario Bergoglio, ahora Papa Francisco, diría lo siguiente: Nos conocimos en 1972 en el Colegio Máximo de San Miguel en Buenos Aires, exponiendo la singularidad del camino espiritual de San Ignacio de Loyola él), y el camino espiritual de San Francisco yo. Allí discutimos sobre hermenéutica de un francés, cuyo nombre no recuerdo, y también sobre la vertiente de la teología de la liberación argentina (del pueblo silenciado y la cultura oprimida), la nuestra brasileña y la peruana (sobre la injusticia social y la opresión histórica de los pobres y los afrodescendientes). De esta reunión hay una foto que él, desde Roma, tuvo la amabilidad de enviarme, donde aparecemos todo un grupo de teólogos y teólogas, la mayoría ya no están entre nosotros, algunos perseguidos y torturados por la represión bárbara del ejército argentino o del chileno. Después nos perdimos de vista.
El Papa Francisco: teólogo de la liberación integral
Supe por su profesor de teología, recientemente fallecido, Juan Carlos Scannone, el mayor representante de la teología argentina de la liberación, que Bergoglio entró a la Orden Jesuita como una vocación adulta (antes era químico, como aparece en la película). Inmediatamente se entusiasmó con este tipo de teología de la liberación de cuño argentino y allí hizo un voto que siempre cumplió, incluso como cardenal de Buenos Aires: cada semana pasaba una tarde o incluso un día en una villa misera; siempre solo, entraba en las casas y hablaba con todo el mundo. No vivía en el palacio cardenalicio, ni tenía automóvil. Andaba en bus o en metro. Vivía solo en un apartamento y se hacía él mismo la comida.
Fue Superior Mayor de los Jesuitas de Argentina, actuando especialmente en la región de Buenos Aires. De joven era muy riguroso. Aquí tuvo que enfrentarse a una situación muy grave que lleva en su corazón hasta el día de hoy: dos jesuitas, el padre Jalics y el padre Yorio (a este lo conocí personalmente en Quilmes) vivían en un barrio pobre, apoyando a los pobres y marginados. Los que trabajaban con el pueblo, como en Brasil en 1964 (y quizás también hoy bajo el nuevo gobierno autoritario de Bolsonaro), eran considerados marxistas y subversivos. Estaban vigilados por los órganos de seguridad militar. Bergoglio fue informado de que serían secuestrados con las torturas subsiguientes. Trató de salvarlos incluso apelando al voto de obediencia, típico de su Orden, en el sentido de que dejaran la favela para no ser víctimas de la represión violenta.
Ellos argumentaron de forma evangélica: "Un pastor no abandona a su rebaño, a su pueblo; participa de su destino; vale más obedecer al Dios de los pobres que obedecer a un superior religioso humano".
Efectivamente fueron secuestrados y duramente torturados. Jalics se reconcilió con Bergoglio y vive en Alemania, mientras que Yorio se sintió abandonado y se distanció de él (murió en Uruguay hace años). Pude sentir su amargura personal al mismo tiempo que trataba de comprender el impasse al que se enfrenta una autoridad religiosa responsable en situaciones límite. Aun así, Bergoglio escondió a muchos en el Colegio Máximo de San Miguel o los llevó a la frontera de otro país para escapar de una muerte segura.
Papa Francisco: el cuidado de la Casa Común
EliminarAl ser elegido Papa, volvimos a comunicarnos. Sabiendo que había estado ocupado intensamente con el tema de la ecología integral, involucrando a la Casa Común, la Madre Tierra y vinculado con la difusión y puesta en práctica de los valores y principios de la Carta de la Tierra (www.cartadelatierra.org), me solicitó colaboración, lo que hice con asiduidad. Pero me advirtió: "no envíes los textos al Vaticano, porque no me los entregarán (el famoso sottosedere de la Curia: sentarse encima y olvidar), sino envíalos directamente al embajador argentino ante la Santa Sede, que todos los días muy temprano toma el mate conmigo".
Así lo hice. Dicen que se nota la presencia de mis pensamientos y temas en la encíclica Laudato Si: sobre el cuidado de la Casa Común (2015). Pero la encíclica es del Papa y él puede elegir a los consultores que quiera. También envié textos al Sínodo Panamazónico de 2019. Contestó agradeciéndolo.
Al elegir el nombre de Francisco bajo la inspiración de su amigo brasileño, el cardenal Cláudio Hummes, que le sugirió el nombre de Francisco y hacer una clara opción por los pobres, se transformó. El rigor jesuítico se unió con la ternura franciscana. Con los problemas internos de la Curia, la pedofilia y la corrupción financiera en el Banco Vaticano es extremadamente estricto. Por el contrario, con la gente es visiblemente tierno y fraterno.
Ningún papa anterior ha amonestado con tanta dureza al sistema, que ha perdido su sensibilidad, su solidaridad con los millones de pobres y hambrientos, su capacidad de llorar y es adorador del ídolo del dinero. Depreda la naturaleza y es anti-vida y anti-Madre Tierra. No necesitamos indicar a qué sistema se refiere. Su opción por los pobres es rotunda. Debido a sus valientes posturas ante la emergencia ecológica de la Tierra, el calentamiento global y la deshumanización de las relaciones humanas, se ha convertido en un líder religioso y político. Su voz es escuchada y respetada en todo el mundo.
Dos modelos de hombre y dos modelos de Iglesia
EliminarEl propósito de la película es mostrar dos modelos de personaje religioso y dos modelos de Iglesia.
Primero muestra cómo Ratzinger y Bergoglio, ambos, son humanos, profundamente humanos. En este sentido, ambos tienen su lado positivo y también su lado oscuro. El Papa Benedicto XVI, su indulgencia y lenidad con los pedófilos. No debemos olvidar que escribió a todos los obispos, bajo sigilo pontificio, que nunca debe romperse, para que no entregasen a los sacerdotes y obispos pedófilos a los tribunales civiles; esto desmoralizaría a la institución de la Iglesia. Debían confesar su pecado y ser trasladados a otro lugar.
El Papa no se dio cuenta suficientemente de que no se trataba sólo de un pecado perdonable por la confesión. Era un crimen contra inocentes que la justicia común debía investigar y castigar. No se pensó en las víctimas, solo en salvaguardar la imagen de la Iglesia como institución. Tal omisión fue fuertemente criticada por el Cardenal Bergoglio como aparece claramente en la película.
El papa Benedicto XVI siguió la huella de Juan Pablo II, que era moral y doctrinalmente conservador. Intentó relativizar el aggiornamento del Concilio Vaticano II (1962-1965). Veía a la Iglesia como una fortaleza asediada por todos los lados por enemigos, es decir, por los errores y las desviaciones de la modernidad. La solución propuesta fue volver a la gran disciplina anterior, proveniente del Concilio de Trento (1545-1563) y del Concilio Vaticano I (1869-1870). La centralidad era la ortodoxia y la sana doctrina, como si las prédicas fueran lo que salvaba y no las prácticas.
En esta línea, el Cardenal Joseph Ratzinger fue estricto: más de 110 teólogos y teólogas fueron condenados, depuestos de sus cátedras, silenciados (en Brasil, Yvone Gebara y yo personalmente) o castigados de alguna manera. Uno de ellos, un excelente teólogo, fue condenado sin ninguna explicación. Estaba tan deprimido que pensó en suicidarse. Solo se curó cuando fue a América Central para trabajar con las comunidades eclesiales de base. La vida de fe del pueblo sencillo y pobre le devolvió el sentido de la vida.
Hubo un invierno eclesial severo. Toda una generación de sacerdotes se formó en este estilo doctrinal, con la mirada puesta en el pasado, usando los símbolos del poder clerical. Del mismo modo fueron consagrados una pléyade de obispos, más autoridades eclesiásticas ortodoxas que pastores en medio de su pueblo.
El Papa Francisco es un modelo distinto de personalidad religiosa. Él viene del fin del mundo, fuera de la vieja y casi agonizante cristiandad europea. Y ha traído una primavera para la Iglesia y para el mundo político mundial.
Primeramente, innovó los hábitos. Al negarse a usar la "mozzeta", esa pequeña capa blanca llena de brocados que los papas llevaban sobre sus hombros, símbolo del poder absoluto de los emperadores romanos paganos, en la película dice claramente: "el carnaval ha terminado". No acepta la cruz de oro, continúa con su cruz de hierro; rechaza los zapatos rojos (de Prada) y continúa con sus viejos zapatos negros. No se anuncia a sí mismo como Papa de la Iglesia, sino como Obispo de Roma y sólo a partir de ahí, Papa de la Iglesia Universal. Al ser presentado como nuevo Papa pide al pueblo que rece por él y le dé la bendición. Solamente después él bendice al pueblo. Aquí aparece claramente una nueva visión teológica, conforme al Concilio Vaticano II: primero viene el Pueblo de Dios y después el Papa y las demás autoridades eclesiásticas al servicio de este Pueblo de Dios.
Anima a la Iglesia no con el derecho canónico, sino con el amor y la colegialidad (en consulta con la comunidad de obispos). En su primer discurso público dice: "Cómo me gustaría una iglesia pobre y para los pobres...". No vive en el palacio pontificio, lo que sería una ofensa para el poverello de Asís, sino en una casa de huéspedes. A la hora de comer guarda fila como los demás y comenta con humor: "así es más difícil que me envenenen".
EliminarPrescinde de un automóvil especial y de un cuerpo de protección personal. Se mezcla entre la gente, da las manos a quienes se las extienden y besa a los niños. Es padre y abuelo querido de las multitudes.
Su modelo de iglesia es el de un "hospital de campaña" que atiende a todos sin preguntar de dónde vienen y cuál es su situación moral. Es una "iglesia en salida" hacia las periferias humanas y existenciales. Respeta los dogmas y las doctrinas, pero afirma claramente que prefiere situarse vivamente ante el Jesús histórico, optando por un encuentro directo con las personas y el cuidado pastoral de la ternura. Insiste en que Jesús vino a enseñarnos a vivir el amor incondicional, la solidaridad y el perdón. Para él es central la misericordia infinita de Dios. Y va más allá al decir: "Dios no conoce una condenación eterna, porque perdería ante el mal. Y Dios no puede perder. Su misericordia no tiene límites". Por lo tanto, llama a todos, una vez purificados de su maldad, a la casa que el Padre y Madre de bondad han preparado para todos desde la eternidad. Morir es sentirse llamado por Dios y uno va alegremente al Gran Encuentro.
En términos de ecumenismo, enfatiza que las distintas iglesias deben reconocerse mutuamente y todas juntas ponerse al servicio del Reino de justicia, de solidaridad, de fraternidad y de amor, alimentando la llama sagrada de la espiritualidad que se oculta dentro de cada persona.
Es otro tipo de pontificado, otro modelo de ser humano, que reconoce que perdió la paciencia cuando una mujer tiró bruscamente de su mano y se la apretó con fuerza. Molesto, le palmoteó la mano dos o tres veces. Pero al día siguiente pidió públicamente perdón. Es naturalmente humilde y reconoce su debilidad.
Dos Papas: diferentes y complementarios
EliminarEl Papa Francisco abrió toda su humanidad, dándose el derecho a la alegría de vivir, de animar a su equipo favorito, el San Lorenzo, de disfrutar de la música de los Beatles, y hasta conquistó al Papa Benedicto XVI para bailar un tango, impensable en un severo académico alemán. En la película ahí aparece no el Papa, sino el hombre Bergoglio que desentraña la humanidad recogida del hombre Ratzinger. Ambos son diferentes, pero se unen en el baile de un tango de personas mayores.
Para mí la película es una hermosa metáfora de la condición humana, con dos formas diferentes de realizar la humanidad, que no se oponen, sino que se componen, y se completan, una con ternura y la otra con vigor.
Vale la pena ver la película, porque nos hace pensar y nos ofrece lecciones de escucha mutua, de diálogo abierto, de verdades dichas sin tapujos y una amistad que va creciendo a medida que la relación se distiende con cada encuentro. El perdón que se dan uno a otro y el abrazo final, largo y amoroso, engrandece lo humano y lo espiritual presente en cada uno de nosotros.
Padre Fortea, le pido disculpas por le extenso del artículo de Leonardo Boff, pero extractarlo sería algo así como mutilarlo. Espero que algún día también abra su corazón a quienes llama "ultraprogresistas" y que a veces no lo somos tanto. No hace falta que comparta nuestras ideas y sensibilidades, sin duda tan diferentes a las suyas, pero se puede amar y orar las personas sin que ello implique comulgar con sus ideas.
EliminarUn abrazo afectuoso.
**orar por las personas**
EliminarBoff da por cierto que Francisco enseño a bailar tango a Benedicto. Suficiente argumento para desmerecer el insufrible texto chupamedias del brasilero...
EliminarNo, gracias...Neeeeeext!!!
EliminarPara pasar un poco el trago amargo esta esecena de los Simpsons en dos idiomas! Me hace el día siempre que la veo, esto supera con creces esas pel´cuals infumables, esto sí que es un guión :
EliminarA la grande le puse Cuca o a la grande le puse mordiscos
Eliminar*escena
*películas
A la grande le puse cuca o mordiscos
EliminarXq no usan links?
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarVamos a ver, D. Juan Julio: cuando una persona ha sido condenada repetidamente por la Iglesia por desviar sus doctrinas en contra de ella (como es el caso de Leonardo Boff) publicar o difundir sus escritos -como hace Vd.- es cuando menos una falta de respeto por las decisiones de los pastores que el mismo Cristo dejó al cuidado de sus ovejas.
EliminarAsí que deje de verter porquerías desviadas de herejes desobedientes en este blog, porque es que parece Vd. un instrumento del demonio volcando siempre tanta basura y fealdad en foros de gente sana.
Por cierto, aprovecho para repetirle que la página Filmafinity es una auténtica basura como crítica cinematográfica, pues depende de las productoras y por lo tanto no hay criterio que no sea interesado. Hasta un tonto lo ve. Pero para Vd. es el oráculo. Ridículo todo.
Bendito sea Dios!
Eliminar🤗🤗🤗
EliminarJajajaj el que contabiliza mis comentarios nos enrolla con testamento de hereje . ZzzzzzzZzzzzzzzZzxZZZ.
EliminarQue cruz. Cae pronto el q juzga.
SURREALISMO. En fin....
Lux 6:49 p. m.
EliminarNo creo que Leonardo Boff sea tan tonto como para no distinguir la realidad de la ficción en la película. Anthony McCarten, el guionista, creo que lo hizo muy bien, pues una película sobre papas puede resultar mortalmente aburrida sin algunas dosis de humor y ficción.
Que "la amistad es más fuerte que cualquier doctrina, siempre humana" es precisamente eso: una "doctrina humana".
ResponderEliminarDespués de leer algunos artículos en los últimos días que trataban todo lo relacionado con el libro del cardenal Sarah, el ex guardia suizo se convenció de que parte de la prensa quiere presentar a Benedicto XVI como el personaje reflejado en la ficción y no por lo que realmente es. A este respecto, dijo: “Los que nos venden son verdaderas bromas, como si los periodistas describieran al Papa Benedicto como ficción cinematográfica y no como la verdadera”. Su idea parte de una experiencia directa y del tipo de relación que se estableció entre ellos: “Puedo decir que he servido a un buen, magnánimo, amable, completamente desinteresado en cuestiones relacionadas con el poder y la apariencia”.
ResponderEliminarP. Fortea de acuerdo con lo que dice, miré gran parte de la película porque en ese momento estaba de visita y lo vieron unos familiares, el filme transmite información falsa con el objetivo de influir y manipular a las personas.
ResponderEliminarEs una película de desinformación.
Piller explica que se pueden contar muchos episodios para que la gente entienda por qué Benedicto XVI es tan diferente a cómo se le quiere presentar desde los medios. Cuenta cuándo bautizó a su sobrino, o cuándo un día se acordó de que era su santo, o incluso cuando les hacía tener dulces durante los turnos de noche. Pero el episodio más especial puede que sea el del último día del pontificado, que coincidió con su último día de servicio: “Ese día yo también terminé mi servicio como guardia suizo y Benedicto XVI, a pesar de lidiar con una situación tan delicada, se acordó de mí y se aseguró de que encontrara un nuevo trabajo”.
ResponderEliminarUno de esos indignados ha sido Grégoire Piller, un ex guardia suizo que sirvió en el Vaticano durante bastante tiempo y que pasó 8 años trabajando junto al Papa Emérito. Después de haber visto la película de Netflix, este hombre decidió desmentir la imagen que de Benedicto se da en la película, ofreciendo sus propios recuerdos. “Me sorprendió y desagradó ver a un Benedicto XVI presentado como codicioso, malo, mezquino, animado por una sed incontrolable de poder. En el fondo de mi corazón pensé: ¡pero este no es el Papa que he conocido y servido!”, dice Piller en La luce di Maria.
ResponderEliminarOtro que juzga la película sin verla.
EliminarNada más dice lo que dijo Piller.
EliminarYo la he visto y no me convenció. Menos por el rosa y la música del final.
Aquí el artículo completo sobre el guardia suizo. Un hombre que sí convivió con Benedicto XVI y relata su experiencia.
ResponderEliminarhttps://infovaticana-com.cdn.ampproject.org/v/s/infovaticana.com/2020/01/21/ex-guardia-suizo-defiende-a-benedicto-xvi-este-no-es-el-papa-que-he-conocido/amp/?amp_js_v=a2&_gsa=1&usqp=mq331AQCKAE%3D#aoh=15803146940788&_ct=1580314702488&referrer=https%3A%2F%2Fwww.google.com&_tf=De%20%251%24s&share=https%3A%2F%2Finfovaticana.com%2F2020%2F01%2F21%2Fex-guardia-suizo-defiende-a-benedicto-xvi-este-no-es-el-papa-que-he-conocido%2F
... a mi me gustó la película. Considero que representa la visión que algunos tienen con respecto a dos hombres de la Iglesia con personalidades diferentes. Claro que es ficticio y nunca se va a comparar con la realidad! ... peroe parece que la película da pie para establecer un diálogo con aquellos que están lejos de ls Iglesia!
ResponderEliminarNo creo que la película sirva de mucho porque los que conozco que lo han visto no han hecho si no despotricar de la iglesia católica.
EliminarSiendo sincera, la película me despierta muy poco interés. Prefiero leer sus palabras, el personaje no es importante.
ResponderEliminarEl actor que representa al Papa Francisco de joven, Juan Minujín, es uno de los peores actores de Argentina. Por lo general trabaja en novelas de humor y en nada se parece al Papa Francisco de Joven. Fue elegido por ser aliado del colectivo feminista pro aborto de actrices argentinas y por su participación en la primera temporada de la serie "El Marginal", en donde llegó a participar en escenas de relaciones homosexuales con desnudo total y asesinatos. Por lo que resulta gracioso que represente este papel, juzgando al personaje y sin herramientas al lado de figuras cómo Anthony Hopkins y Jonathan Pryce, que pese al guión devaluado tienen peso actoral ya solo por estar sentados inmóviles.😆
ResponderEliminarCierto, Fla, Juan Minujín no es lo mejor de la película. Eso y cuando Benedicto se enfada. Benedicto no pierde la compostura, es fino, elegante y humilde.
EliminarLas personas más inteligentes son las que menos pierden la compostura.
EliminarCierto, Anxelina, yo no debo ser muy inteligente, pues la pierdo con cierta frecuencia.
EliminarCreo que cuando Benedicto se enfada reza el Rosario. 😆
EliminarNo creo que se enfade mucho. Se nota enseguida que es una persona apacible, tal vez por eso ser papa se le hizo tan cuesta arriba.
EliminarPara mí es superficial, coincido con el Padre Fortea en esa media hora.
ResponderEliminarNo sabía que pudiera animarse a ver Netflix, si hubiera sabido le pasó la mía, pero ya voy a preguntar más y a asumir menos.
Seguiré pendiente de sus otras observaciones, yo ya he puesto en otro post mi opinión, a lo mejor la vuelvo a traer.
A mi lo único que me pareció bueno fueron los dos actores principales y la fotografía.
ResponderEliminarPor lo demás, un guión tendenciosamente progresista en que se presenta a Francisco como un "papa progre" (y por lo tanto "bueno") y a Benedicto como un "papa ultraconservador" (y por lo tanto "malo") .......
El problema que le veo a la película es que se falsea y confunde con personas verídicas y hechos reales...
A ver si me explico.....si la película fuese "la historia de dos curas cualquiera" , en la cual se confrontan la versión "progre" del catolicismo versus la versión "vintage" conservadora, ok me podría parecer hasta interesante...
El defecto que le veo es que eso que pretende ser un debate social, se plantea distorsionando a dos personas REALES , y distorsionando la realidad con una mezcla de hechos reales y ficticios...
En fin, no le doy un aprobado a la película porque no plantea un debate serio, sino el típico debate modernista de "lo progre es bueno" y "lo conservador es malo, facha, caca y bla bla bla..."
Así es. Demagogia pura y dura.
EliminarEn FilmAffinity le dan un 6,9, no llega al notable por los pelos. Esa es la nota que yo le daría.
EliminarFernando Meirelles es un gran admirador de Francisco. Los directores de cine son humanos, como lo es el Padre Fortea cuando pone a parir a los ultraprogresistas y a Franco como un católico ejemplar. Sólo Dios es totalmente justo y objetivo.
EliminarQuizás yo pondría 6 puntos porque como dije los dos actores son muy buenos y la fotografía también. El argumento pincha mucho para mí y peca de inocente
EliminarJuan Julio claro que sí amigo, somos humanos débiles y con derecho a expresarnos, pero hay espacios y circunstancias para hacerlo ....
Eliminarpor eso te digo si Meirelles es progresista (no sé si lo es, en cualquier caso está en todo su derecho a expresarlo) que haga una película que se llame "la historia de dos curas ficticios que pensaban diferente",y que ponga un cura bueno y uno malo.....
A partir de que toma dos personas REALES y las distorsiona (ni Francisco es tan tan , ni Benedicto es muy muy) y que luego mezcla hechos reales con ficción y se da el lujo de poner "basada en hechos reales"(trampita marketinera con letra pequeña) creo que se vuelve peligrosa la película porque desinforma y roza la mentira...
Respecto al antiprogresismo de Fortea y su franquismo, es bastante desagradable pero no distorsiona la historia, sólo opina.... y la verdad cuesta entender que un buen católico sea franquista pero qué vamos a hacer, son opiniones
Oiga Dani: lo que cuesta creer es que sepa Vd. tan poco de historia, para no saber que tanto los papas, como los obispos contemporáneos al Caudillo alabaron y condecoraron grandemente su labor como defensor de la fe.
EliminarFranco sencillamente salvó a los católicos españoles del exterminio marxista.
No me haga enumerar la cantidad de veces que le elogiaron, ande, y vaya a estudiar un poquito de historia antes de soltar la primera cretinada que se le ocurre.
Dani 7:37 p. m.
EliminarLas películas son productos comerciales destinados a la venta. Hay muy pocas películas basadas en hechos reales en las que el director no añada ni quite nada para que le compense filmarlas. Un director no solamente tiene que contar una historia, sino que tiene que despertar el interés del público y venderla. Date cuenta de que una película como "Los dos papas" cuesta muchos millones y, como mínimo, el productor tiene que recuperarlos.
Antes de que existiera el cine, Dante introdujo en la "Divina Comedia" personajes de la mitología pagana que nada tenían que ver con el cristianismo, así como situó en el infierno a más de un papa corrupto. Nadie, que yo sepa, lo criticó por eso. Es más, los teólogos se inspiraron en la "Divina Comedia" para construir la escatología cristiana.
Juan Julio Alfaya 10:42 p.m.
EliminarVisto así (como producto comercial) estoy de acuerdo con usted. Bendiciones
Ramón Pascual 10:28 p. m.
EliminarQuerido Ramón, si me tengo que dejar llevar por el impulso, escribiría un extenso y agresivo texto en respuesta a su violento comentario hacia mí.
Pero es usted católico y yo también. Y yo no me peleo con un hermano en Cristo, porque si entre hermanos nos peleamos, nos devoran los de afuera...
Sin ánimo de discutir el tema Franco, solamente un breve inciso...defendernos de los marxistas (o de cualquiera que nos persiga) es harto necesario, pero no justifica ni supone otras acciones que no hacían falta (como enquistarse 40 años en el poder y perseguir y asesinar a quien pensara distinto)...Jesús nos encomendó evangelizar a través del Amor...
Le pido, Ramón, que no sea tan duro y ofensivo.
Bendiciones para usted
¿Puede decirme un sólo caso -uno solo- de una persona que el Generalísimo "persiguiera y asesinara por pensar distinto(sic)"?
EliminarNo, no puede ¿Verdad...?
Pues entonces deje de fingir ser católico y no mienta, que es Vd. un venenoso difamador.
En vez de eso, aprenda a escribir bien en español.
Y dé las gracias, como la Iglesia española contemporanea de Franco, a quien nos libró del genocidio católico.
Ramon Pascual
Eliminar6:01 p.m.
Te deseo mucho amor, felicidad y prosperidad para ti y toda tu familia católica.
Te mereces todo lo mejor de lo mejor en esta vida y eso es lo que te deseo.
Que el Amor y la Bendición de Dios te cubran para siempre.
Yo solo deseo, Dani, que Vd. no mienta, inventando difamaciones que quedan escritas y que causan dolor en los demás.
EliminarMenos buenos deseos y mejores obras, oiga.
Querido Ramón, dejémoslo aquí. Caeré en pecado de ira y no quiero desperdiciar mi tiempo y mi energía en esto.
EliminarOraré por usted, para que no se pierda su alma. Por mi parte conversación terminada.
Pues a mí SÍ que me gustó esta película. Claro que yo de cine soy un ignorante. Y además la vi con una persona “progre” y “no creyente” que se emocionaba (como la mayoría de los “progres”) cada vez que el ahora papa Francisco llevaba la contraria a “lo establecido”. Y yo estaba (y estoy) más que deseoso (¿demasiado, quizá?) de encontrar espacios y momentos de encuentro con los que no conocen a Jesús y/o no aceptan a su Iglesia.
ResponderEliminarLuego vi el ‘review’ que hizo Mons. Munilla (a quien tengo en gran consideración y estima) y me quedé algo ‘chafado’, dudando de mi propio criterio, cosa que antes rara vez hacía —más bien me empeñaba en ganar todas las batallas— pero ahora cada vez hago más, recordando un salmo que dice algo así somo “los pensamiemtos de los hombres son inconsistentes” (ahora no recuerdo cuál, ni las palabras exactas).
https://www.aciprensa.com/noticias/obispo-munilla-califica-de-muy-injusta-la-pelicula-de-netflix-los-dos-papas-93144
Yo vi el vídeo de Munilla y no cambió mi opinión en lo más mínimo. Él está en su derecho de expresarse de acuerdo con sus principios, lo mismo que Leonardo Boff con los suyos. Afortunadamente no somos robots y la inteligencia y la libertad son dones de Dios que debemos utilizar de la mejor manera posible.
Eliminar“Lo bueno de esta película es que es un petardo (aburrida) y me parece imposible que tenga éxito entre el gran público. Sus diálogos son bastante insufribles... y eso es una buena noticia”, agregó.
Eliminarjajaja cuando se les pase el boom emocional con el tiempo y se distancien, dirán lo mismo que Mons. Munilla.
Que majo es y que estupendo.
EliminarEs sanador y no como los gurús que aparecen sin cesar.
Ahora es el tiempo de ellos cuando las personas no saben a qué aferrarse y les vuelven locos. Pero " YO OS MANDARÉ UN PROFETA".
Con motivo de la conmemoración de la liberación del campo de concentración de Auschwitz, es curiosa la ignorancia histórica de parte del público occidental.
ResponderEliminarNo sólo del público, sino de las élites;
el presidente obama se inventó que su tío fue uno de los soldados que "liberó" Auschwitz, aquí lo dice:
https://www.youtube.com/watch?v=SV1sxq8mqvA
El campo fue liberado por el ejército rojo, como parte de su campaña masiva de aniquilación de la maquinaria de guerra nazi. Fue el ejército rojo el que más contribuyó a la victoria aliada contra el III reich.
El ejército rojo hubiera podido sólo con el III reich, aunque hubiera necesitado más tiempo y con mayor coste en sangre, pero de ningún modo ni Inglaterra ni EEUU hubieran podido derrotar al III reich, el desembarco de NOrmandía se produce en 1944 cuando el ejército rojo ya avanza imparable hacia Alemania.
Alemania luchaba sola en contra de todo el mundo. El famoso "eje Berlín-Roma-Tokio" tuvo muy poca utilidad para Alemania. Italia era un lastre y Japón, al otro lado del mundo, inició una guerra no querida por Hitler, que en nada beneficiaba en las operaciones europeas.
EliminarItalia era un lastre porque en todas las batallas perdía y Hitler tenia que enviar sus tropas para ayudar a Mussolini. Así sucedió en Los Balcanes, en Grecia y en Libia. Evidentemente estas operaciones bélicas restaron divisiones para otros frentes de batalla.
El ejercito alemán era tan eficiente que los Estados Unidos solos o la Unión Soviética sola no hubieran podido vencerlo; fue necesario que estas dos fuerzas se unieran y colaboraran. Los Estados Unidos estuvieron enviando, durante toda la guerra, convoyes de navíos cargados de suministros bélicos de toda clase a través del Atlántico, (puertos de Múrmansk y de Arcángel). Esto sin contar toda la ayuda y soporte técnico que se le brindo a la industria soviética. Ante una guerra librada solamente entre Alemania y la Unión Soviética esta última hubiera sucumbido rápidamente a la embestida nazi. Si Alemania perdió fue precisamente porque Inglaterra y los Estados Unidos salieron al rescate de la U.R.S.S.
Así es, no fueron los estadounidenses, sino las tropas soviéticas las que en enero de 1945 entraron a Auschwitz y liberaron a los prisioneros que quedaban. Una gran parte de ellos estaban confinados en la enfermería y el resto no poseía ya las facultades físicas para verse envueltos en las marchas de la muerte programadas por los nazis para trasladarlos a otros campos.
EliminarEn muy fácil condenar el pasado cuando ya no está presente. El caso del nazismo es el ejemplo más claro de nuestra historia reciente. Lo curioso es que quienes condenan enérgicamente las atrocidades cometidas en este régimen son tremendamente dialogantes con los nazismos actuales. Mientras conmemoramos los campos de hace setenta años, los que más tocan el bombo, son los más atentos a apoyar los intereses de la dictadura inhumana de Beijing y, entre estos intereses, el silencio monstruoso, despiadado y sucio. En China, la esclavitud, la tortura, la sustracción de órganos, la aniquilación de la personalidad se aplican con mucha peor eficacia, superando sin medida el horror de Auschwitz. Alguien ha escuchado una sílaba de condena del Papa Francisco a los campos de concentración, fundados por Mao Tse Dong en la década de 1950, que proliferaron para aplastar a millones y millones de hombres, mujeres y niños y que siguen en la actualidad. Siempre debemos estar atentos a la propensión a la retórica de los centros de poder. La retórica es siempre el dispositivo más barato de los sinvergüenzas para ocultar la verdad. No entramos en otros holocaustos actuales como el aborto o la persecución de cristianos en África. Las amistades con dictaduras comunistas se extienden a Cuba y Venezuela. Demasiada retórica vacía sobre un pasado lejano para ocultar las vergüenzas presentes.
EliminarTosatti Marco
EliminarLo rescatable también padre es que al menos usted evitó sacar dinero de su bolsillo para ver esa película en Netflix.
ResponderEliminarEsa plataforma es ABIERTAMENTE Pro aborto, Pro lobby LGBTI, promueve la hostilidad hacia la religión católica y promueve el ocultismo y el satanismo.
Y son los jóvenes de hoy en día los que consumen esa basura. Por algo vemos a la juventud de hoy tan confundida, tan maleable y dúctil a cualquier cosa que no sea Dios.
No solo a los jóvenes...
EliminarEsto es un ejemplo.
Desafortunadamente tienes razón, María Isabel.
EliminarCierto. Netflix es basura parida por Soros.
EliminarPues hasta los curas caen en la tentación de Netflix..
EliminarConozco a alguno que lo tiene, al parecer no les parece tanta basura
Tb creo que habrá curas y curas, la diversidad como aquí.
Eliminar"Il mondo bello xq diverso"
Netflix tiene muchísimas series. Son incontables los directores y guionistas. Hay series excelentes. Algunas son de lo mejor que he visto en televisión. Como Daredevil o Black Mirror o The Witcher (muy reciente). También hay muy buenas películas de terror. No todo es malo. Tiene cosas increíbles.
EliminarY si nos ponemos en ese plan cancelen entonces sus suscripciones de televisión por cable. Y de paso anulen el sistema operativo de sus computadoras (Microsoft es uno de los principales promotores financieros del aborto). Tampoco vuelvan a usar Google ni Facebook, etc. Tampoco utilicen ningún producto de Johnson & Johnson... y un largo etc. No vuelvan a Mc Donalds ni a Pizza Hut. En fin... Se asombrarían de la cantidad de empresas y marcas que usamos y pagamos todos los días y que colaboran directamente con el aborto y la ideología de género.
Dejen de decir estupideces.
EliminarLo dice el que afirma que va a ser papa.
EliminarHablando de estupideces.
Hoy en día casi todo lo que nos rodea es abierta y financieramente pro aborto y pro gay.
EliminarTendríamos que irnos a vivir a la luna o a marte para no colaborar de manera indirecta y no deliberada con las causas nefastas de las empresas o marcas que nos rodean. Ya que sería la única forma objetiva de prescindir de sus productos y servicios.
EliminarSe sintió aludido!
EliminarNos sentimos aludidos, mejor dicho!
EliminarNo, lo digo por tí! jajajajaja!
EliminarSolo te reflejas en mí.
EliminarHombre, que te sentiste ofendido por mi comentario y atacaste. Pues qué le vamos a hacer!
EliminarNo me sentí ofendido. He escuchado tantas veces ese argumento pobre que casi mecánicamente lo respondí. Y con cierto disgusto, eso sí. Apenas natural.
EliminarExactamente lo mismo puedo decir de tu réplica a mi comentario. La he escuchado tantas veces! Por ej. No comas doritos, no utilices google, bla bla bla...
EliminarQuerida, la diferencia es que yo sí tengo razón y tú no.
EliminarLo tuyo se llama "moralidad selectiva o a la carta".
EliminarAceptamos de manera implícita lo que nos conviene o aquello que no estamos dispuestos a dejar y prescindimos y descalificamos lo que simplemente no nos gusta (como Netflix).
Por supuesto, Leonardo, por supuesto, jajajaja!
EliminarLa vida no está para perder el tiempo urgando en la basura Leonardo. Y pues eso, Netflix y en sí la TV actual basura. Pero si a ti te gusta pues adelante!
No he visto esa película ni me interesa para nada.
ResponderEliminarPero sí me interesan mucho los dos personajes: Jóseph Rátzinger (Benedicto XVI) y Jorge Mario Bergoglio (Francisco).
Al primero lo conocí mucho antes que al segundo: lo leí por primera vez hacia 1992. Las reflexiones de Jóseph Rátzinger siempre me han ayudado mucho. Me han abierto horizontes. Yo no lo veo como el supuesto hombre tradicional e inmóvil que algunos quieren imaginarse (no sé si sincera o insinceramente).
A mí Jóseph Rátzinger siempre me ha parecido un tipo muy aperturista, muy sensible a profundizar en las cuestiones de fe, nada inmóvil ni acartonado. Siempre, eso sí, enraizado en una fe católica sin fisuras.
El Papa Francisco, a quien he conocido mucho después, es otra bendición del Cielo. También me está ayudando mucho. Su actitud hacia grandes problemas, como el cuidado de la casa común (nuestro planeta), problemas sociales, ecumenismo, la ayuda a quienes viven en situaciones morales irregulares, etcétera, me está dando muchas luces. Lo considero un papa tan importante como Benedicto XVI.
En resumen, doy gracias a Dios por ambos papas, que son un gran regalo del Cielo.
Cierto, cada Papa aporta su carisma y ninguno es excluyente
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
Eliminar... concuerdo en que los medios actuales van más bien en dirección contraria a la Fe y la Moral de Nuestra Iglesia. Pero a la vez, nuestra condición como católicos en el mundo es la de testimoniar y dialogar con los demás; es cierto, no podemos aislarnos ni irnos por el momento a otro planeta. No todo es basura!!! Debemos estar en el mundo y ver la Realidad con los ojos de Jesús y de María Santísima.
ResponderEliminar18 comentarios y testamento más o menos para el control del blog Pater.
ResponderEliminarY todavía queda.
😭😭😭
EliminarNecesito cambiar el chip.
EliminarAdioooooos
https://youtu.be/Ur9XthDjkq0
Jajaj. Ay la inocencia!. Guay
Eliminarhttps://youtu.be/3HRawqB9ERU
Si el padre colocara en venta una franquicia de su blog, sería el primero en hacer una oferta jajajajajajaja!!!
EliminarVaya día! Jajajaj.
EliminarEl que el papado haya perdido el poder temporal le quita un tremendo peso de encima al cristianismo y habrá que comenzar de nuevo a partir de cero. Si no me equivoco mucho, tendremos la suerte de vivir como los primeros cristianos si no queremos ser borrados del mapa por la incredulidad y la indiferencia en crecimiento acelerado. Para algunos es una desgracia, para mí es una suerte.
ResponderEliminar¿Consideras una suerte volver a los tiempos de las persecuciones? ¿De que lado estas?
ResponderEliminarConsidero una suerte quitarme de encima el peso insoportable de tantas tradiciones humanas que se nos han ido acumulando a lo largo de los siglos. Si el precio a pagar son las persecuciones, bienvenidas sean. Mejor caminar ligero de equipaje como hizo nuestro Maestro.
ResponderEliminar20
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarDía litúrgico: Jueves III del tiempo ordinario
EliminarTexto del Evangelio (Mc 4,21-25): En aquel tiempo, Jesús decía a la gente: «¿Acaso se trae la lámpara para ponerla debajo del celemín o debajo del lecho? ¿No es para ponerla sobre el candelero? Pues nada hay oculto si no es para que sea manifestado; nada ha sucedido en secreto, sino para que venga a ser descubierto. Quien tenga oídos para oír, que oiga».
Les decía también: «Atended a lo que escucháis. Con la medida con que midáis, se os medirá y aun con creces. Porque al que tiene se le dará, y al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará».
«¿Acaso se trae la lámpara para ponerla debajo del celemín o debajo del lecho?»
Rev. D. Àngel CALDAS i Bosch
(Salt, Girona, España)
Hoy, Jesús nos explica el secreto del Reino. Incluso utiliza una cierta ironía para mostrarnos que la “energía” interna que tiene la Palabra de Dios —la propia de Él—, la fuerza expansiva que debe extenderse por todo el mundo, es como una luz, y que esta luz no puede ponerse «debajo del celemín o debajo del lecho» (Mc 4,21).
¿Acaso podemos imaginarnos la estupidez humana que sería colocar la vela encendida debajo de la cama? ¡Cristianos con la luz apagada o con la luz encendida con la prohibición de iluminar! Esto sucede cuando no ponemos al servicio de la fe la plenitud de nuestros conocimientos y de nuestro amor. ¡Cuán antinatural resulta el repliegue egoísta sobre nosotros mismos, reduciendo nuestra vida al marco de nuestros intereses personales! ¡Vivir bajo la cama! Ridícula y trágicamente inmóviles: “ausentes” del espíritu.
El Evangelio —todo lo contrario— es un santo arrebato de Amor apasionado que quiere comunicarse, que necesita “decirse”, que lleva en sí una exigencia de crecimiento personal, de madurez interior, y de servicio a los otros. «Si dices: ¡Basta!, estás muerto», dice san Agustín. Y san Josemaría: «Señor: que tenga peso y medida en todo..., menos en el Amor».
«‘Quien tenga oídos para oír, que oiga’. Les decía también: ‘Atended a lo que escucháis’» (Mc 4,23-24). Pero, ¿qué quiere decir escuchar?; ¿qué hemos de escuchar? Es la gran pregunta que nos hemos de hacer. Es el acto de sinceridad hacia Dios que nos exige saber realmente qué queremos hacer. Y para saberlo hay que escuchar: es necesario estar atento a las insinuaciones de Dios. Hay que introducirse en el diálogo con Él. Y la conversación pone fin a las “matemáticas de la medida”: «Con la medida con que midáis, se os medirá y aun con creces. Porque al que tiene se le dará, y al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará» (Mc 4,24-25). Los intereses acumulados de Dios nuestro Señor son imprevisibles y extraordinarios. Ésta es una manera de excitar nuestra generosidad.
No se... creo que antes no se hablaba aquí - me dirijo a los antiguos del blog - de la división de los católicos, ahora hay un pertinaz deseo de dividir a éstos en progres y carcas" (no me acuerdo de la palabra) como en la política queriendo hacer partidos aquí tb con la intención de positivos unos y negativos otros.
EliminarCristo no vino a separar sino a proclamar la Unidad y el Amor y cada persona es una piedra en la formación de la Iglesia por supuesto con la fricciones, perdón, corrección que necesitamos unos de otros y viendo en esta forma de hacer la Iglesia nuestros pecados y con la ayuda de los Sacramentos llegar a conversión y ser criaturas nuevas construyendo el Reino de Dios.
Claro, si creemos en la Iglesia y no despotricamos contra ella.
Buen día a todos. Es un día nuevo.
Himno de la alegría
Eliminarhttps://youtu.be/KFzXUqzvAFI
La intención de dividir es la intención de destruir.
EliminarTodos los católicos creemos en el Credo de la Iglesia: "...CREO en el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y en la Vida Eterna).
AMEN
Himno
Eliminarse utiliza el himno de Laudes:
Autor del cielo y el suelo,
que, por dejarlas más claras,
las grandes aguas separas,
pones un límite al hielo.
Tú que das cauce al riachuelo
y alzas la nube a la altura,
tú que en cristal de frescura
sueltas las aguas del río
sobre las tierras de estío,
sanando su quemadura,
danos tu gracia, piadoso,
para que el viejo pecado
no lleve al hombre engañado
a sucumbir a su acoso.
Hazle en la fe luminoso,
alegre en la austeridad,
y hágale tu claridad
salir de sus vanidades;
dale, Verdad de verdades,
el amor a tu verdad. Amén.
El verdadero cristiano vive perseguido, desde tiempos de Jesús ya que si rechazas al mundo, el mundo te rechaza a ti. No vienen a tu casa a tirarte la puerta abajo pero la persecución está en la calle desde hace años. En forma de acoso social, acoso laboral, presiones, burlas, comentarios ofensivos...
ResponderEliminarAl que no cree en la violencia y no devuelve las ofensas le llaman hipócrita, queda marcado, socialmente no vale nada, te conviertes en el cubo de la basura de los demás
ResponderEliminarLa persecución ya existe, por parte de los wahabitas, que intentaron exterminar a todos los cristianos de Oriente Medio, planes abyectos paralizados por Soleimani.
ResponderEliminarEso que dices es de un cinismo increíble, porque supongo que imaginas que a los cristianos que crucificarán o descuartizarán no serás tú sino otros pobres diablos.
Claro, claro, cómo al que no van a perseguir es a tí, pues que importa, no interesa. No me asombra en absoluto tu comentario Juan Julio.
ResponderEliminarTarde o temprano "Sale por la boca lo que hay en corazon".
ResponderEliminar🤗🤗🤗
JAJAJAJA Leonardo Boff... que chistoso que haya alguien que se lo pueda tomar en serio.
ResponderEliminarNuria 1:34 p. m.
ResponderEliminarLa persecución, al principio, no suele implicar violencia física. Pero cuando las acusaciones, los insultos y las amenazas les parecen insuficientes, pasan a la violencia física. Jesús, antes de ser crucificado, fue espiado, calumniado, de blasfemo, acusado de no respetar el sábado, de reunirse con publicanos, pecadores y acoger a prostitutas, de curar en nombre de Satanás, etcétera. La persecución sigue más o menos la misma secuencia, de menos a más.
Lo sé, la he sufrido. Cuando la intimidación no te afecta, aumenta su agresividad. Lo he vivido tantas veces que presiento el momento en el que me tengo que retirar.
ResponderEliminarNuria 7:10 p. m.
ResponderEliminarYo nunca he sido tan descalificado, calumniado ni insultado como en este blog, sobre todo por parte de tres piadosísimas mujeres. Esa ha sido para mí una lección inolvidable. Fue algo que me cogió totalmente de sorpresa y creo que no supe reaccionar de una manera asertiva. No me esperaba nada parecido por parte de gente que se confiesa seguidora de Cristo. Todo en esta vida requiere un aprendizaje y yo, la verdad, entonces era muy ingenuo y estaba muy verde. Así que reaccioné de la peor manera posible, como Pedro cuando sacó la espada y le cortó la oreja al siervo del sumo sacerdote. Todavía me queda mucho que aprender.
Sólo Dios sabe lo que hay en el interior de cada uno de nosotros. " He aquí que os envío como ovejas en medio de los lobos. Sed, pues, prudentes como las serpientes y sencillos como las palomas".
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