lunes, octubre 17, 2022

Fortuga

 

Lo primero de todo, dar mi enhorabuena a José Juan. ¡Ha logrado una foto de las tortugas que sostienen un sagrario! Os puedo asegurar que encontrarlas es dificilísimo. Os lo dice alguien como yo que por mi trabajo con los libros me veo forzado a hacer continuamente búsquedas en Google. Era un verdadero reto y, vaya, lo ha conseguido. He llamado ya al taller que produce ese sagrario, pero no lo ha cogido nadie. Lo volveré a intentar más tarde. Si averiguo algo, os lo compartiré. De nuevo, mi enhorabuena, José Juan, porque esta era una búsqueda muy complicada.

Hoy se me ha ocurrido un pensamiento que también os participo. Siempre decimos que las Puertas del Infierno no prevalecerán sobre la Iglesia. Pero he pensado que también es cierto que la Iglesia no prevalecerá sobre las Puertas del infierno. Es decir, que esas puertas están cerradas de forma perfecta por la voluntad de sus moradores. Razón por la que la Iglesia jamás podrá entrar en el infierno a liberar a sus moradores. Podrá moverse en las inmediaciones de esas puertas, pero jamás podrá prevalecer sobre esas voluntades réprobas.

Más retos: Le he dado muchas vueltas a esta línea de san Pablo en Romanos 1, 16-17. La parte que no entiendo es la que pongo en rojo. La traducción de esa parte en rojo es literal del griego:

Pues no me avergüenzo del Evangelio, que es una fuerza de Dios para la salvación de todo el que cree: del judío primeramente y también del griego. Porque en él se revela la rectitud de Dios, de la fe hacia la fe, como dice la Escritura: El justo vivirá de la fe.

He mirado comentarios y no sé, todavía no veo claro qué quiere decir Pablo con esa expresión. Sea dicho de paso, la traducción no es “el justo vivirá por la fe”, como algunos repiten, sino que la traducción correcta es “de la fe” (ek pisteos).