sábado, enero 14, 2023

Rerum novarum

 

Ayer cené con una familia (rebosante de niños) y durante la sobremesa probé las gafas. Realmente, para mí, se trató de una experiencia totalmente nueva. Quedé muy sorprendido. Paseé entre las órbitas del sistema solar, entré en un templo del sur de Asia, y jugué a un juego en el que había que atrapar unas figuras de colores.

En mi adolescencia esto me hubiera entusiasmado. A estas alturas prefiero una taza de té con unos amigos, charlando reposadamente o jugando una partida de crocquet.