domingo, agosto 02, 2020

Una mujer valiente con nervios de acero


44 comentarios:

  1. A mí me pasó algo así con un caballo en una finca, yo no llevaba nada que comer, pero, cuando me acerqué al establo casi me estampa un beso o una mordida!!! Parece que tengo buenos reflejos al parecer jajajajaja!!!

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  2. Hola padre, bendiciones desde Mexico por favor recen por mi, necesito sabiduría para tomar decisiones, la guía del Espíritu Santo en mi vida y por supuesto la ayuda de Dios. Les agradezco sus oraciones por Ivan

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    1. Que la luz del Espíritu Santo te ilumine, y te sabiduría. Ivan cuanta con nuestras oraciones.

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  3. Pobre Zebra. Solo quería un pedazito.

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  4. Me imagino que este serial va desaparecer como los años tan bien escritos del blog... Aaahh que bonitos post esos ...jejej

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  5. 𝔻𝕦𝕝𝕔𝕖𝕤 𝕤𝕦𝕖ñ𝕠𝕤

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  6. Buenos días… ¡otro domingo, día del Señor, que ha vencido la muerte! Nada hay que temer ya. ¡Nada!

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    1. ¡Y feliz día de Nuestra Señora de los Ángeles! (2 de agosto)

      Indulgencia de la Porciuncula:

      http://www.franciscanos.org/enciclopedia/indulgencia.htm

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    2. Hoy el texto patrístico del Oficio de Lecturas de la Liturgia de las Horas es precisamente uno de los famosos de la época de los padre apostólico:

      De la EPÍSTOLA DE BERNABÉ:

      ❝Salud en la paz, hijos e hijas, en el nombre del Señor que nos ha amado.

       Ya que las gracias de justificación que habéis recibido de Dios son tan grandes y espléndidas, me alegro sobremanera, y, más que toda otra cosa, de la dicha y excelencia de vuestras almas. Pues habéis recibido la gracia del don espiritual, plantada en vosotros. Me felicito aún más, con la esperanza de ser salvado, cuando veo de verdad el Espíritu que se ha derramado sobre vosotros del abundante manantial que es el Señor. Hasta tal punto me conmovió el veros, cosa tan deseada para mí, cuando estaba entre vosotros.

       Aunque os haya hablado ya muchas veces, estoy profundamente convencido de que me quedan todavía muchas cosas por deciros, pues el Señor me ha acompañado por el camino de la justicia. Me siento obligado a amaros más que a mi propia vida, pues una gran fe y una gran caridad habitan en vosotros por la esperanza de alcanzar la vida divina. Considerando que obtendré una gran recompensa si me preocupo de hacer partícipes a unos espíritus como los vuestros, al menos en alguna medida, de los conocimientos que he recibido, he decidido escribiros con brevedad, a fin de que, con la fe, poseáis un conocimiento perfecto.

       Tres son las enseñanzas del Señor: la esperanza de la vida, principio y término de nuestra fe; la justicia, comienzo y fin del juicio; el amor en la alegría y el regocijo. testimonio de las obras de la justicia.

       El Señor, en efecto, nos ha manifestado por medio de sus profetas el pasado y el presente, y nos ha hecho gustar por anticipado las primicias de lo porvenir. Viendo, pues, que estas cosas se van cumpliendo en el orden en que él las había predicho, debemos adelantar en una vida más generosa y más excelsa en el temor del Señor. Por lo que respecta a mí, no como maestro, sino como uno de vosotros, os manifestaré algunas enseñanzas que os puedan alegrar en las presentes circunstancias.

       Ya que los días son malos y que el Altivo mismo posee poder, debemos, estando vigilantes sobre nosotros mismos, buscar las justificaciones del Señor. Nuestra fe tiene como ayuda el temor y la paciencia, y como aliados la longanimidad y el dominio de nosotros mismos. Si estas virtudes permanecen santamente en nosotros, en todo lo que atañe al Señor, tendrán la gozosa compañía de la sabiduría, la inteligencia, la ciencia y el conocimiento.

      El Señor nos ha dicho claramente, por medio de los profetas, que no tiene necesidad ni de sacrificios ni de holocaustos ni de ofrendas, cuando dice: ¿Qué me importa el número de vuestros sacrificios? -dice el Señor-. Estoy harto de holocaustos de carneros, de grasa de cebones; la sangre de toros, corderos y machos cabríos no me agrada. ¿Por qué entráis a visitarme? ¿Quién pide algo de vuestras manos cuando pisáis mis atrios? No me traigáis más dones vacíos, más incienso execrable. Novilunios, sábados, asambleas, no los aguanto.


      Rᴇsᴘᴏɴsᴏʀɪᴏ:

      ℟. Comprendimos que el hombre no se justifica sino por creer en Cristo Jesús. Por eso hemos creído en Cristo Jesús, para ser justificados por la fe de Cristo.

      ℣. Abrahán creyó a Dios, y eso le valió la justificación.

      ℟. Por eso hemos creído en Cristo Jesús, para ser justificados por la fe de Cristo.


      Oʀᴀᴄɪóɴ ᴄᴏʟᴇᴄᴛᴀ ꜰɪɴᴀʟ:

      Ven, Señor, en ayuda de tus hijos, derrama tu bondad inagotable sobre los que te suplican y renueva y protege la obra de tus manos en favor de los que te alaban como creador y como guía.

      Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.

      Aᴍéɴ.

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    3. Dicen que algunas especies de animales no son domesticables (como por ejemplo la zebra que le da el mordisco a la pobre chica de este gif animado que nos regala el padre Fortea hoy), pero yo no estoy tan seguro. También dicen lo mismo de los gorriones (que no son domesticables) pero a juzgar por lo ‘civilizado’ que se ha vuelto mi querido Tap 🐦 más bien parece cosa de cuán entregado sea uno.

      Leyendo (hoy 2 de agosto, día tan señalado para la Orden Franciscana) las famosas «Florecillas» de San Francisco de Asís llama la atención cómo habla con las golondrinas y con esa humilde sencillez del poverello predica a los pajaritos del campo, recordándoles ser AGRADECIDOS pues ni tejen ni hilan, y ni Salomón en todo su esplendor se vistió como una de ellas [aves del cielo].

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    4. Me hubiese gustado ganarme alguna indulgencia por visitar una catedral o iglesia franciscana pero todo el domingo es toque de queda no podemos salir.

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    5. Nota: Tap 🐦 es un precioso gorrión común que apareció herido a la puerta de mi casa un día de hace ya algo más de 3 años y desde entonces vive en casa, curiosamente haciendo vida familiar como uno más (revoloteando suelo por la casa, sin haber conocido jaula nunca, viniendo a comer a la mesa con nosotros cuando es la hora y le gritamos “Taaap, a comeeer”, cuidándote sin separarse cuando te resfrías, etc., etc. Realmente sorprendente.). El otro día mi párroco vino a cenar y viendo cómo volvía una y otra vez a posarse en su brazo a pesar se haberlo espantado varias veces, exclamó: “este pajarito me está evangelizando a mí, ¡increible!”

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    6. El Señor te bendecirá especialmente por el ‘toque de queda’, querida F…

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    7. FLORECILLAS DE SAN FRANCISCO

      ❝Preguntó san Francisco:

      -- ¿Qué es lo que quiere de mí mi Señor Jesucristo?

      El hermano Maseo respondió:

      -- Tanto al hermano Silvestre como a sor Clara y sus hermanas ha respondido y revelado Cristo que su voluntad es que vayas por el mundo predicando, ya que no te ha elegido para ti solo, sino también para la salvación de los demás.

      Oída esta respuesta, que le manifestaba la voluntad de Cristo, se levantó al punto lleno de fervor y dijo:

      -- ¡Vamos en el nombre de Dios!

      Tomó como compañeros a los hermanos Maseo y Ángel, dos hombres santos, y se lanzó con ellos a campo traviesa, a impulsos del espíritu. Llegaron a una aldea llamada Cannara; San Francisco se puso a predicar, mandando antes a las golondrinas que, cesando en sus chirridos, guardasen silencio hasta que él hubiera terminado de hablar. Las golondrinas obedecieron. Y predicó con tanto fervor, que todos los del pueblo, hombres y mujeres, querían irse tras él movidos de devoción, abandonando el pueblo. Pero San Francisco no se lo consintió, sino que les dijo:

      -- No tengáis prisa, no os vayáis de aquí; ya os indicaré lo que debéis hacer para la salvación de vuestras almas.

      Entonces le vino la idea de fundar la Orden Tercera [Franciscanos] para la salvación universal de todos. Y, dejándolos así muy consolados y bien dispuestos para la vida de penitencia, marchó de allí y prosiguió entre Cannara y Bevagna.

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    8. Iba caminando con el mismo fervor, cuando, levantando la vista, vio junto al camino algunos árboles, y, en ellos, una muchedumbre casi infinita de pájaros. San Francisco quedó maravillado y dijo a sus compañeros:

      -- Esperadme aquí en el camino, que yo voy a predicar a mis hermanitos los pájaros.

      Se internó en el campo y comenzó a predicar a los pájaros que estaban por el suelo. Al punto, todos los que había en los árboles acudieron junto a él; y todos juntos se estuvieron quietos hasta que San Francisco terminó de predicar; y ni siquiera entonces se marcharon hasta que él les dio la bendición. Y, según refirió más tarde el hermano Maseo al hermano Santiago de Massa, aunque San Francisco andaba entre ellos y los tocaba con el hábito, ninguno se movía.

      El tenor de la plática de San Francisco fue de esta forma:

      -- Hermanas mías avecillas, os debéis sentir muy deudoras a Dios, vuestro creador, y debéis alabarlo siempre y en todas partes, porque os ha dado la libertad para volar donde queréis; os ha dado, además, vestido doble y aun triple; y conservó vuestra raza en el arca de Noé, para que vuestra especie no desapareciese en el mundo. Le estáis también obligadas por el elemento del aire, pues lo ha destinado a vosotras. Aparte de esto, vosotras no sembráis ni segáis, y Dios os alimenta y os regala los ríos y las fuentes, para beber; los montes y los valles, para guarecemos, y los árboles altos, para hacer en ellos vuestros nidos. Y como no sabéis hilar ni coser, Dios os viste a vosotras y a vuestros hijos. Ya veis cómo os ama el Creador, que os hace objeto de tantos beneficios. Por lo tanto, hermanas mías, guardaos del pecado de la ingratitud, cuidando siempre de alabar a Dios.

      Mientras San Francisco les iba hablando así, todos aquellos pájaros comenzaron a abrir sus picos, a estirar sus cuellos y a extender sus alas, inclinando respetuosamente sus cabezas hasta el suelo, y a manifestar con sus actitudes y con sus cantos el grandísimo contento que les proporcionaban las palabras del Padre santo. San Francisco se regocijaba y recreaba juntamente con ellos, sin dejar de maravillarse de ver semejante muchedumbre de pájaros, en tan hermosa variedad, y la atención y familiaridad que mostraban. Por ello alababa en ellos devotamente al Creador.

      Finalmente, terminada la plática, San Francisco trazó sobre ellos la señal de la cruz y les dio licencia para irse. Entonces, todos los pájaros se elevaron en banda en el aire entre cantos armoniosos; luego se dividieron en cuatro grupos, siguiendo la cruz que San Francisco había trazado: un grupo voló hacia el oriente; otro, hacia el occidente; el tercero, hacia el mediodía; el cuarto, hacia el septentrión, y cada banda se alejaba cantando maravillosamente. En lo cual se significaba que así como San Francisco, abanderado de la cruz de Cristo, les había predicado y había hecho sobre ellos la señal de la cruz, siguiendo la cual ellos se separaron, cantando, en dirección de las cuatro partes del mundo, de la misma manera él y sus hermanos habían de llevar a todo el mundo la predicación de la cruz de Cristo, esa misma cruz renovada por San Francisco. Los hermanos menores, como las avecillas, no han de poseer nada propio en este mundo, dejando totalmente el cuidado de su vida a la providencia de Dios.

      En alabanza de Cristo. Amén.❞

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    9. Qué ejemplo San Francisco de Asís. Es lo que yo llamo ver a Dios en todo cuanto nos rodea y actuar en consecuencia. Es fe en todo su esplendor. Es aceptar la voluntad de Dios siempre, siempre: nos lleva a la santidad.

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    10. Qué gracioso tu gorrión Tap

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    11. Hoy día de la porciuncula.

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    12. Gracias por recordar. El año pasado estaba allí. Indulgencia (con los debidos requisitos)

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  7. Es frecuente que los équidos, jueguen con el pelo de ellas si lo llevan suelto. Lo he visto varias veces.

    No sé, a lo mejor se creerá esta cebra que se trata de un plato espaguetis, jajaja.

    Bromas aparte, suele pasar con los caballos. Pero el susto, ha sido mutuo, pues la cebra se ha retirado al segundo.

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  8. Jesús: "Tus problemas?, los conozco, exponermelos es perder tiempo para amarme... Si me amas, me preocupo de todo lo que te aflige..."
    Diario de Margarita 12/06/1977

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  9. En el Parque de Cabarcenos (Santander) vi una manada de zebras que al revolcarse en el plovo rojo del suelo se habían teñido y estaban muy graciosas con sus rayas negras sobre fondo rojo (en lugar de blanco).
    También hay una elefanta que pare un elefantito cada año y ya ha formado una familia numerosa.
    Los osos también no paran de criar y han de regalarlos a otros zoos.

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  10. Por buscar una lógica a estos vídeos con final poco halagüeño, sería la envidia, ira, pereza, soberbia, gula y él de la cebra no me cuadra mucho en avaricia ..

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  11. Los cinco minutos del Espíritu Santo

    Cuando le perdemos el miedo al Espíritu Santo, y sabemos confiar en él, entonces de verdad podemos descansar en su presencia, nuestro vacío interior se va llenando con lo único que de verdad lo sana: el amor. Ese hueco vacío que tenemos adentro, esa profunda soledad enferma que a veces nos reclama como un nudo en la garganta, sólo se llena con el amor: dejándonos amar por el Espíritu Santo, e intentando amar a los demás cada día. No nos saciamos alimentando las excusas, sino alimentando los motivos para dejarnos amar y para amar generosamente.

    Pero si optamos por vivir de manera superficial, pensando sólo en nuestra comodidad y buscando permanentemente distracciones engañosas, la vida misma nos golpeará para que reaccionemos. Las cosas que nos pasen, las renuncias que tengamos que realizar, nos obligarán a enfrentar ese vacío interior que tenemos. El dolor profundo de una pérdida cualquiera nos llevará a preguntarnos por el sentido de nuestra vida.

    No es que Dios nos castigue para que aprendamos. Es la vida misma, que está llena de pérdidas, porque todo pasa, todo se acaba, y cuando perdemos una seguridad que nos permitía aferrarnos a algo, entonces no nos queda más que preguntarnos para qué vivimos. Si estamos sufriendo por algo, pidámosle al Espíritu Santo que nos ayude a aprender algo de ese sufrimiento, que entendamos el mensaje que tenemos que aprender de ese problema. Entonces, nuestro sufrimiento servirá para algo.

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  13. Hoy me han hecho una pregunta que no he sabido responder bien, y pensé que quizá aquí sí sabríais bien: ¿cuando uno comulga, SÍ recibe a Dios pero NO recibe al Padre o al Espíritu? Y de forma similar: ¿en la adoración al Santísimo expuesto en la custodia, es Dios quien está realmente presente pero no el Padre o el Espíritu Santo? ¿Cómo de relevante o importante (o no) es para un católico darse cuenta o plantearse esto?

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    2. Dónde está el Padre está el Hijo y el Espíritu Santo. Acuérdate son tres que forman una unidad.

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    3. Las tres personas de la Santísima Trinidad son inseparables. Donde está una de ellas, están las tres en una unidad perfecta. No concibo que en la hostia consagrada esté Jesucristo y no estén el Padre ni el Espíritu Santo. Lo que pasa es que Dios, Uno y Trino, se nos puede dar a través del Hijo en su Encarnación y en la Eucaristía, a través del Espíritu Santo siempre que lo invoquemos y a través del Padre siempre aceptemos su paternidad y sintamos como hermanos a todos los hombres, sin exclusión de ningún tipo.

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    4. Felicidades con retraso, Alfonso, que ayer fué tu santo, Alfonso de Ligorio, 1 de Agosto

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    5. Muchísimas gracias por acordarte de mi, Lucía… aunque mi santo es el 23 de enero, San Ildefonso (arzobispo de Toledo en el siglo VII), aunque no sé por qué nos llaman Alfonso (debe ser una abreviatura o algo).

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    6. Es bellísimo lo que deciñs de la Santísima Trinidad. Y tenéis razón: si junto con el cuerpo de Cristo se comulga también su divinidad y esta es indivisible, ahí comulgamos también al Padre y al Espíritu Santo.

      Me gustaría también leer algo sobre esto, algún documento ministerial o teológico o espiritual: ¿alguna recomendación?

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    7. De todas formas, lo de estar “comulgando a Dios Padre” en la Hostia Consagrada se me hace raro. ¡Dios mío, en qué líos mentales se mete uno que quizá no debiera! Yo si Él quiere que lo sepa o entienda algún día, que así sea, y si no, pues que así sea también. Gracias por transformar el pan y el vino en tu cuerpo y sangre, Señor, sin lo que nada podemos. ¡Esto sí lo creo firmemente!

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    8. Lo que en la Comunión se recibe directamente es al Hijo. En la Adoración, se adora a Jesús bajo la especie sacramental del pan, es decir, se adora a su cuerpo que ahora está vivo y glorificado tras ser ofrecido en la cruz a perpetuidad para la salvación de todo el mundo. En un segundo plano, implícitamente, están operando también el Padre y el Espíritu Santo porque están unidos los tres. Pero la Eucaristía supone reconocer la centralidad del hombre nuevo Jesús como cumbre última de los movimientos salvíficos del Padre y del Espíritu en la historia. Jesús es el gran protagonista, el resumen de la divinidad entera. El acento está en Jesús. Comulgar con el cuerpo de Cristo supone reconocer a Jesús como el centro del alma, es afirmar que se le ama. Un saludo

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    9. Demasiado conceptual todo.

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